Di Terlizzi añadió que los códigos éticos de Més y del Govern «no le permiten aceptar regalos, es injustificable» y recordó que ya no era la primera vez que Barceló estaba «contra las cuerdas» esta legislatura. «Su presencia es un problema para el Govern», destacó el podemita antes de que se conociera la noticia de su dimisión.
Por su parte, Javier Marí, representante del Partido Popular en el debate televisivo de ayer, señaló que la presidenta balear, Francina Armengol, era la más beneficiada por todo este escándalo. «Mientras se habla de Més no se habla de sus carencias», aseguró el presidente del PP de Sant Josep.
El periodista Joan Miquel Perpinyà apuntó que Biel Barceló «es una persona honesta que ha cometido un error» y aseguró que el PSOE «ya no puede respaldarlo más» después de que también se viera salpicado por el asunto de los contratos a dedo a su jefe de campaña, Jaume Garau, que terminaron con la dimisión de la consellera de Transparència, Ruth Mateu, y de otros cargos políticos de Més.
Marí añadió que el Govern está protagonizando «una legislatura entera con un escándalo tras otro de Més», mientras que Di Terlizzi dijo que el viaje de Barceló «mancha los Acords pel Canvi».
El decreto sobre el catalán del Govern también protagonizó parte del debate en el programa Bona nit Pitiüses. El socialista Enric Casanova justificó la decisión del Govern «para hacer cumplir una ley. La asistencia médica está garantizada y ahora también lo están los derechos lingüísticos». En este sentido, el podemita Di Terlizzi apuntó que «siempre primará el derecho a la asistencia por que se tiene que tranquilizar a la ciudadanía».
El representante del PP señaló que «ya es difícil, y lo vemos verano tras verano, cubrir las plazas y ahora le ponemos un requisito que complica la llegada de gente y, además, no saben si estarán en su puesto de trabajo tres meses o un año».
Perpinyà recordó que ningún sindicato votó a favor del decreto elaborado por el Govern y que fue modificado a petición de Més para que el conocimiento del catalán dejara de ser un mérito para pasar a ser un requisito. En este sentido, el periodista señaló que «sería prudente que el Govern buscara más consenso porque ya vimos en la pasada legislatura que todo lo que se hace sin contar con los afectados acaba fracasando».
Los representantes políticos también dieron su opinión sobre la flamante Ley de Urbanismo balear, una nueva normativa que Di Terlizzi calificó de «muy buena» a excepción de la disposición adicional que permite la legalización de terrenos urbanizados en más de un 90% de Platja d’en Bossa y Cala Tarida y que en su día fueron desclasificados por sentencia judicial. «Hay mucha gente afectada en Cala Tarida», justifico el socialista Casanova, mientras que el ‘popular’ Javier Marí afirmó que «los que gobernamos estamos para solucionar los problemas».
1 comentario
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Bueno, por lo menos ha dimitido siendo coherente con su código ético, y sabiendo que cometió un error garrafal. Los demás que se apliquen el cuento (en toda España), y hagan lo mismo. En España no dimite ni Dios !!!