En este caso, la visita a este céntrico barrio de Vila se debió a las gestiones que hacen año tras año y desde hace más de una década los miembros de la Asociación de Vecinos y como suele ser habitual el buen ambiente reinó durante toda la mañana. Además, sus Majestades de Oriente llegaron hasta el Parque de la Paz de forma más humilde – caminando desde la sede de la asociación –, pero mucho más original que en otros lugares de la isla, ya que fueron acompañados durante todo el trayecto por un grupo de guitarristas vestidos de pastorcillos.
En el parque les esperaban ansiosos decenas de niños y padres junto al escenario instalado para la ocasión. Con bastante más retraso del anunciado, aparecieron Melchor, Gaspar y Baltasar y empezaron a saludar y a abrazarse y hacerse fotos con todos, y tras repartir una gran cantidad de caramelos ocuparon su lugar. Allí, estaban preparados todo tipo de regalos que fueron siendo entregados gracias a la ayuda de sus pajes de forma ordenada mientras se iba anunciando su nombre.
Además, la jornada también incluyó un concierto de villancicos por sevillanas a cargo de los guitarristas de la Asociación de Vecinos de Es Clot, baile por bulerías con sus bailarines y una chocolatada ofrecida de forma altruista por Churrería Moreno y que se repartió de forma gratuita a todos los niños que acudieron.
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