Balears y Canarias han aunado esfuerzos para reclamar al Gobierno central mejoras para los empleados del sector de la hostelería, que ascienden a medio millón en ambas comunidades. En concreto, solicitarán el reconocimiento de una quincena de enfermedades profesionales en el sector, así como la jubilación anticipada para las profesiones con mayor carga de trabajo dentro de la hostelería. Estas medidas, que cuentan con el apoyo de sindicatos y empresarios turísticos, se plantearán en el seno de la Mesa Tripartita para la Calidad de la Ocupación en el sector de la Hostelería creada el pasado mes de noviembre por el Estado y que no se ha vuelto a convocar, por lo que los gobiernos autonómicos balear y canario pidieron celeridad para un nuevo emplazamiento. Así lo indicaron ayer en Palma el conseller de Treball, Iago Negueruela, y su homóloga canaria, Cristina Valido, tras reunirse para abordar las propuestas que plantearán al Ministerio de Empleo.

Sobre las enfermedades profesionales, Negueruela subrayó la importancia de su reconocimiento porque si se siguen tratando como comunes el trabajador recibe menor prestación y atención. Destacó el aumento de la evidencia científica que constata que son consecuencia de actividades prolongadas en el tiempo, de manera que son habituales al final de la vida laboral y citó algunos ejemplos, como el síndrome de túnel carpiano y la epicondilitis. Por su parte, Valido explicó que muchas de las enfermedades profesionales que afectan a la hostelería ya están reconocidas en otros ámbitos y añadió que reconocerlas implicaría «menos absentismo, mejores condiciones laborales, menor siniestralidad, más tiempo trabajando, mejor prevención, detección y tratamiento».

La petición de los gobiernos canario y balear será que se aborde dicho reconocimiento modificando el Real Decreto de enfermedades profesionales para que sea «más sencillo, más rápido y esa agilidad mejore la salud de los trabajadores del sector». Consideran que ese cambio técnico «depende únicamente del acuerdo y la voluntad política».

En cuanto a la jubilación anticipada, Negueruela y Valido reconocieron que el debate es más complejo porque puede afectar también a otros colectivos en situación similar por cargas de trabajo. Además, se debería abordar en el marco del Pacto de Toledo.