Baches y socavones se abren paso en el asfalto, a menudo cuarteado, hasta el punto de suponer un peligro para los vehículos que circulan por ellos, en especial motos, ciclomotores y bicicletas. Numerosas vías públicas de la ciudad de Ibiza presentan un deficiente estado de conservación debido a que el asfalto es viejo y sobre todo porque las averías no han sido reparadas, con lo que los pequeños baches se van haciendo más grandes.

Las vías donde esto sucede no son únicamente titularidad del Ayuntamiento de Eivissa, sino que también las hay que son propiedad del Consell d’Eivissa, como en numerosos tramos de la ronda de circunvalación Ei-10, especialmente en sus rotondas.

La mayoría de desperfectos que ilustran esta información no son producto de un día, ni surgen espontáneamente de la noche a la mañana. Se trata de baches y socavones de importancia e incluso peligrosos para la seguridad vial. En las imagenes se puede comprobar que en la rotonda de Es Gorg, en el primer cinturón de ronda de Ibiza, entrada a la calle alcalde Bartomeu Rosselló Sala, unos enormes baches fueron reparados hace pocos días.

Los aparcamientos públicos no se libran de la deficiente conservación del asfalto. Arriba se puede observar uno de los muchos baches que presenta el aparcamiento disuasorio de Es Dominguets.

Calles importantes, como la del ceramista Joan Daifa, en un lateral del Ibiza Gran Hotel, tampoco se libran de presentar un estado lamentable, impropio de una ciudad moderna. Pero tampoco una calle estrecha y pequeña, de un solo carril, como Arquebisbe Cardona Riera.

Los usuarios de las vías públicas saben de lo peligroso que es meter una rueda en uno de los baches y socavones. Y lo costosoque resulta, porque es evidente que un firme en mal estado supone un mayor desgaste de los neumáticos y suspensiones.

Y aunque se van arreglando con cuentagotas, el trabajo se les acumula a los operarios encargados de las reparaciones porque los baches son la tónica dominante en las calles de la capital de la isla.