Gabriel Company y la ministra Dolors Montserrat, ayer, a su llegada al centro cultural de Jesús.

La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Dolors Montserrat, se refirió ayer en Ibiza a las movilizaciones contra la sentencia de ‘La Manada’ y aseguró que el gobierno tiene la intención de analizar la tipificación de los delitos sexuales «por si hay que mejorar o adaptar el Código penal». Según dijo, el Gobierno del PP «siempre va a defender a las mujeres y a trabajar en la lucha contra la violencia que se ejerce contra las mujeres». «Siempre hemos estado al lado de las víctimas y lo hemos demostrado siempre que gobernamos”, indicó Montserrat, que puso como ejemplos la aprobación del Estatuto de las Víctimas y la regulación de la prisión permanente revisable.

Durante su intervención, la ministra también expresó su «condena máxima» por la muerte de una mujer de 34 años presuntamente a manos de su expareja en Burgos y trasladó su «apoyo más sincero a toda la familia de la víctima». Además remarcó que «este Gobierno ha conseguido firmar un Pacto de Estado en la lucha contra la violencia de género» y que se han incluido en los PGE «80 millones de euros más» para combatirla. «Este pacto también constituye un mensaje muy potente al maltratador: que no tiene cabida en nuestra sociedad. Dice que toda la sociedad en su conjunto estamos implicados al cien por cien en la lucha contra la violencia de género; que hay salida y que juntos erradicaremos esta lacra», concluyó Montserrat.

Un gobierno social

La ministra hizo estas declaraciones antes de participar en el ciclo Objectius a debat del PP de Ibiza en el que estuvieron presentes el presidente del PP balear, Biel Company, la eurodiputada Rosa Estaràs o el presidente del PP ibicenco, José Vicente Marí Bosó. Montserrat defendió que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) demuestran que son un Gobierno «social» que «piensa en las familias y en todas y cada una de las personas». «No dejan a nadie atrás», destacó la ministra, que recordó que la principal prioridad es la creación de puestos de trabajo, ya que «es la mejor herramienta de política social que puede tener un país». En este sentido recordó que el Gobierno se propuso como objetivo que en 2020 haya 20 millones de personas trabajando, una cifra que están «convencidos» que lograrán, ya que 2017 ya se cerró con 18 millones y medio de personas trabajando. La ministra enumeró algunos de los beneficios de estos presupuestos como la subida de las pensiones, el aumento de becas o el incremento de las ayudas a la dependencia, a las familias numerosas o a las familias con hijos de 0 a 3 años. «No podemos olvidar que otros gobiernos nos dejaron con una crisis brutal o con tres millones y medio de parados y una Ley de Dependencia en quiebra, que ahora está estabilizada y es viable», indicó Montserrat, quien aseguró que «este es el camino para salir de la crisis». Por último, también celebró que en estos momentos haya hasta ocho millones de mujeres trabajando en España, cifra que nunca se había registrado «en la historia de la democracia o del país».

Company agradeció la visita de la ministra y apuntó que aunque en las islas «muchas veces se dice que Madrid nos mata», cuando se explica lo que hay «realmente» en los presupuestos, «la historia siempre se desmonta». «Es cierto que siempre se necesitan más cosas, pero los presupuestos benefician a Baleares», señaló el popular que dijo que la cuestión es que se sepan gestionar. «Lo que nos pasa con este Govern es que se entretienen pidiendo dinero a Madrid y no son capaces de ejecutar los presupuestos que tienen aquí», añadió.

LA NOTA

«Las lenguas no curan»

Por último, la ministra habló también del decreto del catalán, aprobado por el Govern balear, que obliga a los médicos de a tener un título de catalán para ejercer la profesión. Dolors Montserrat recordó que es “hija de Cataluña” y que su lengua materna es el catalán, pero pidió “no poner barreras” en lo que tiene que ser “la comunión de dos lenguas, como es el catalán y el castellano”. “Cuando un gobierno trabaja en pro de una lengua contra otra, lo que estamos haciendo es dividir a la sociedad y justamente las lenguas no curan», declaró la ministra, que reiteró que “cuando se premia más una lengua que la otra, lo único que estamos haciendo es poner barreras a profesionales sanitarios de cualquier rincón de España que quieran venir a ejercer esta gran profesión”. La ministra considera que esta situación “al final perjudica a los pacientes” y recomendó no “ahondar” más en la “división y la confrontación” recordando lo sucedido en Cataluña. Además, hizo hincapié en que España tiene “uno de los mejores sistemas de salud del mundo”.