Los taxistas no pudieron acceder a la zona portuaria por la mañana a pesar de que se les había informado de que tenían permiso para hacerlo. | Arguiñe Escandón

La Autoritat Portuària de Balears (APB), el Ayuntamiento de Vila, la Asociación de Vecinos y Comerciantes del Puerto de Ibiza, la Federación de la Marina de Ibiza y la empresa Ocibar S. A., concesionaria de Ibiza Magna y encargada del sistema de control de entrada, acordaron, hace unos días, que los taxis pudieran acceder a la fachada marítima a cualquier hora del día y no solo en horario de carga y descarga.

Según dijeron, la entrada «libre» y «controlada» por un supervisor podría hacerse desde ayer a las 11 de la mañana. Sin embargo, la falta de una autorización por parte de APB impidió la circulación de los taxis hasta las 18 horas.

«Nosotros teníamos el visto bueno del Ayuntamiento, con una normativa que teníamos que seguir, pero ha venido APB y han dicho que hasta que no tengan la autorización formal de Palma por escrito no pueden dar la orden de abrir», explicó Raúl Prats, capitán de Puerto.

Esta situación generó el caos en la zona a la que se acercaron varios taxistas que se encontraron con la barrera cerrada y sin posibilidad de acceder a la zona portuaria. De hecho, dos turistas extranjeras tuvieron que descargar numerosas bolsas en la entrada y hacer uso de uno de los boogies gratuitos de los que dispone el puerto.

«Es una pena que un servicio público no pueda dejar al cliente en la puerta», criticó una taxista. «Una cosa es que hagas parada y otra dar un servicio de llegada», señaló otro.

En este sentido, desde ayer a media tarde los taxistas ya pueden circular por la fachada marítima las 24 horas del día. Aún así, la barrera solo estará abierta de 7 a 11 horas y de 16 a 18 horas para todo el público y las 18 horas restantes de forma controlada por un supervisor.

Reglamento de entrada

Los taxis que quieran acceder a la fachada marítima tendrán que cumplir una serie de requisitos. Entre ellos, cabe destacar que solo cuatro de estos vehículos podrán estar en el interior del puerto de manera simultánea. «Nuestra idea era que hubiese una parada dentro con cuatro taxis y que, a parte, pudieran entrar otros cuatro, pero poco a poco», dijo Joaquín Manuel Senén, presidente de la Asociación de Vecinos y Comerciantes.

Además, solo podrán estar en el interior un máximo de 15 minutos y siempre bajo demanda. En caso de superar el límite de tiempo, los conductores pueden ser sancionados con una multa de 90 euros que se reducirá a 45 por pronto pago.

Tampoco podrán superar los 20 km/hora y, aunque todos los taxistas de la isla pueden descargar en el puerto a sus pasajeros, solo los de Vila podrán cargarlos en el interior.

El incumplimiento de estas condiciones podrá comportar el bloqueo de la matrícula y la no entrada de ese taxi durante el resto de la temporada. Si el incumplimiento es generalizado podrá conllevar la cancelación total del sistema de entrada de taxis en la zona portuaria. En concreto, se establecen los meses de junio y julio como meses de prueba antes de tomar la decisión de hacer definitivo este sistema de funcionamiento.

Hace unos meses, Autoritat Portuària negó a los taxistas la entrada al puerto fuera de horario de carga y descarga. Una situación que ha cambiado a raíz de las numerosas quejas por parte de vecinos y comerciantes de la zona que se han visto «perjudicados» durante meses por la falta de taxis que diesen servicio a sus clientes.

«Estamos contentos y creemos que, con el paso del tiempo, irán mejorando las condiciones porque parece ser que, de momento, no quieren que haya mucho tráfico dentro», apuntó Senén.

Además, la línea 50 de autobús, que conecta el aparcamiento disuasorio de es Gorg con el puerto de Ibiza, tenía previsto ampliar el pasado viernes su horario y su recorrido. Aún así, empezó a funcionar el sábado pasada la media tarde.

Esta línea gratuita da servicio a partir de las 07.30 horas con salida desde el aparcamiento de GESA y lo hace de lunes a domingo con una frecuencia de 30 minutos en dirección a Vila. Las paradas del interior del puerto se hacen a partir de las 19 horas.

Con esta decisión que garantiza una mayor comodidad para los usuarios, los diferentes colectivos se muestran contentos y esperan que no haya incidencias que prohiban el servicio en unos meses en los que el puerto sufre una circulación masiva de turistas por sus calles.