El PP acusó ayer en el pleno del Parlament a la consellera de Salut, Patricia Gómez, de “un control deficiente a la concesionaria”, que se encarga de la limpieza y mantenimiento de los qurirófanos de Can Misses, cerrados desde la semana pasada por un foco de moscas, el tercero en dos años.

La consellera de Salut desveló que tras asumir el control de los quirófanos se han detectado defectos estructurales no sólo en el falso techo, sino también en la fachada exterior y en los conductos de ventilación.

De hecho, Gómez anunció que ha pedido una comparecencia voluntaria una vez que finalicen los trabajos “para rendir cuentas".