«Déjate curar por la fuerza del mar»

La reforma, decoración y rediseño de la sala ha introducido colorido, entretenimiento y fantasía, con el objetivo de humanizar el área para que los más pequeños perciban su estancia en el hospital como un juego, así como minimizar su angustia y ansiedad durante el reconocimiento médico y las pruebas.

«Déjate curar por la fuerza del mar», es la frase que se puede leer en la entrada que precede la sala de pediatría del servicio de urgencias, cuyas paredes están decoradas con todo tipo de elementos del mundo marino: barcos, peces, ballenas que sujetan palmeras, submarinos, tesoros perdidos, pulpos… E incluso gafas de realidad virtual que los niños se pueden poner para mantenerse distraídos mientras son atendidos por los médicos.

El proyecto fue diseñado por el equipo de enfermería del hospital y liderado por Lidia Molins, supervisora del servicio. «Empezamos hace un año con un equipo formado por diez enfermeros y una auxiliar de Urgencias que nos reuníamos en nuestro tiempo libre», explicó Molins, que solo tuvo palabras de agradecimiento para su equipo por la labor desarrollada, para María Ángeles Leciñena, jefa del servicio de Urgencias y para Carlos Ramón, fundador de la ONG Proyecto Juntos. «En cuanto tuvimos claro el proyecto nos pusimos en contacto con Carlos Ramón y la verdad es que la sala de pediatría parece completamente otra, muchas familias han mostrado su agradecimiento y estamos muy satisfechos con el trabajo realizado», afirmó Molins. En este sentido, Molins también se acordó del galardón de la II Edición Premios Humana que se llevó el servicio de Urgencias el pasado mes de mayo y que reconoció la labor de Can Misses para mejorar la atención a un paciente con una muerte digna.

Entre las novedades, la sala de espera cuenta con una televisión que emite programas infantiles y la sala de observación con unas cómodas butacas para los familiares que acompañan a los niños. En la consulta, un sistema revolucionario para reducir el dolor de los pinchazos: una mariquita que vibra y aplica frío en el punto tratado y que alivia el dolor. Una niña probó el dispositivo durante la presentación del proyecto.

«Nuestra intención siempre es llevar la alegría dentro de los hospitales y desdramatizar los entornos para que los niños no tengan tanto miedo al hospital», concluyó Carlos Ramón, fundador de Proyecto Juntos.

Plantilla completa

Bartolomé Bonet, jefe del servicio de Pediatría del Hospital Can Misses, explicó a Periódico de Ibiza y Formentera que «tenemos una plantilla de siete pediatras y ahora mismo está completa. Hace un mes, además, incorporamos a nuestra plantilla a un neuropediatra». En Urgencias, los pediatras actúan como consultores, es decir, que el primero en atender es el médico de familia y si hay dudas o cualquier motivo por el que se piense que debe ir el pediatra, «el que está de guardia baja y atiende al paciente», aseguró Bonet. Este servicio está disponible todos los días de la semana y las 24 horas que dura el día.