José Vicente Marí Bosó, ayer, en Madrid.

Un total de 17 compromisarios de las Pitiusas (cinco de Formentera y 12 de Ibiza) se han trasladado a Madrid para asistir al 19º Congreso extraordinario del Partido Popular que se celebra en el Hotel Madrid Marriott Auditorum. La delegación balear la componen unos 70 militantes.

Es una minúscula parte de los 3.082 compromisarios de toda España que participan en la asamblea plenaria y que tienen derecho de voto en esta segunda fase del novedoso sistema de primarias establecido por el partido para elegir al próximo presidente.

Optan al cargo Soraya Sáenz de Santamaría y Pablo Casado, las dos candidaturas más votadas por los afiliados en la primera fase de las primarias. Recordemos que la exvicepresidenta del Gobierno ganó en Ibiza, al obtener 169 votos frente a los 162 de Pablo Casado. En Formentera Sáenz de Santamaría consiguió 12 votos y Pablo Casado obtuvo siete. Sin embargo, en el ámbito balear fue Pablo Casado quien ganó con el 46,75 por ciento de los votos, por delante de Soraya Sáenz de Santamaría (32,67 por ciento de los sufragios).

La participación en el archipiélago balear fue del 82,18 por ciento, siendo las Pitiusas las islas donde mayor porcentaje de militantes votó en las primarias de ayer.

Despedida de Rajoy

La jornada de ayer tarde sirvió para que la formación de centro derecha se despidiera formalmente y por todo lo alto de quien ha sido presidente del partido durante los últimos casi 14 años. Y como en cualquier despedida que se precie, hubo muchos aplausos y también lágrimas.

El congreso convocado tras el anuncio de abandonar la política por parte de Mariano Rajoy, después del inesperado triunfo de la moción de censura presentada por el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, arrancó ayer con el informe de la comisión organizadora, la votación de la mesa que está presidida por la presidenta del Congreso Ana Pastor, el informe de gestión de la secretaria general, Mª Dolores de Cospedal, que fue aprobado, y la intervención del presidente saliente.

«Somos una gran nación. España es mejorable, pero digamos la verdad completa: jamás ha existido una España mejor». Con esta contundente sentencia el expresidente del Gobierno reivindicó su gestión en lo económico al dar «la vuelta por completo a la crisis económica». También respecto al proceso independentista: «Los responsables de aquellos actos están en prisión o huidos de la Justicia», dijo. Igualmente se jactó de no haber pagado «ningún precio político que beneficie a los asesinos; y jamás he procedido a un acercamiento de presos», recordó en referencia a ETA.

Y naturalmente no podía falta la carga contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez: «Una coalición de perdedores nos echó del Gobierno, porque prefieren un gobierno débil para cobrarse sus apoyos a un PP que ni cede ni cederá», dijo tajante. Y añadió: «Cuando las cosas se tuercen, cuando las dificultades arrecian, cuanto el horizonte se nubla, los españoles miran al PP buscando estabilidad y certidumbre. Y volverán a buscarnos», vaticinó.

El discurso de Rajoy fue interrumpido por los asistentes en numerosas ocasiones con largas ovaciones a las que él mismo pedía dar fin.

Marí Bosó no desvela su voto

El presidente del PP de Ibiza, José Vicente Marí Bosó, en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera, tuvo palabras de reconocimiento para Mariano Rajoy: «Hoy despedimos a quien ha sido presidente hasta ahora, Mariano Rajoy, un gran demócrata, un gran político. Y a partir de aquí con ganas de hacer un gran congreso y con ganas de presentar a los españoles un nuevo proyecto reformado para ganar las elecciones, que es de lo que se trata».

Sobre los candidatos Pablo Casado y Soraya Sáenz de Santamaría, afirmó que «los dos candidatos son mucho mejores que el presidente del Gobierno actual», aunque no desveló cual de ellos recibiría su confianza. Sin embargo, se mostró seguro de que la candidatura ganadora integrará a la perdedora: «Estoy seguro de que el que gane tendrá muy en cuenta que hace falta hacer una labor de unión, un trabajo de equipo para volver a gobernar España y para dar solución a los problemas de los españoles».

En ese sentido añadió: «Los dos candidatos saben que lo tienen que hacer a partir del lunes. Saben que entre todos son mejores y no solo entre ellos dos, porque hay que ampliar aún más la base social del partido para poder recuperar tres millones de confianzas que hemos perdido en los últimos años».