Momento de la llegada del cadáver al puerto de Sant Antoni. | DANIEL ESPINOSA

La Guardia Civil investiga la muerte de un hombre cuyo cadáver fue localizado en la mañana de ayer por un bañista que se topó con el cuerpo mientras estaba nadando en la playa de es Pouet, en el municipio de Sant Antoni.

Según relató la persona que encontró el cadáver a Periódico de Ibiza y Formentera, mientras estaba nadando vio a una persona que tenía flotando junto a ella un teléfono móvil y unos aurículares. Al ir a alertarle de que había perdido esos objetos advirtió que se trataba de un cuerpo sin vida que, según detalló, estaba desnudo. En ese momento empezó a hacer señales desde aquel punto a los socorristas que se encontraban en la costa.

Los primeros en llegar al punto en el que estaba flotando el cuerpo sin vida fueron las personas a bordo de la barca de salvamento del club náutico, en seguida alertaron al Servicio Marítimo de la Guardia Civil que fue el que se hizo cargo de la recuperación del cuerpo.

Hasta el escenario del suceso se movilizaron agentes de la Policía Local de Sant Antoni, Guardia Civil y Cruz Roja.

El cuerpo fue trasladado hasta el espigón del puerto de Sant Antoni donde acudió la policía judicial y una jueza que ordenó el levantamiento del cadáver.

Según informaron fuentes policiales, el cuerpo llevaría más de 24 horas en el agua y la víctima sería un varón, de unos 30 años y de origen asiático.
La Guardia Civil se hace cargo de la investigación.

Tres ahogados en tres semanas

Se trata de la tercera víctima mortal registrada en la playa de es Pouet en cuestión de tres semanas. La semana pasada un turista británico de 67 años falleció por ahogamiento tras sufrir una parada cardiorrespiratoria mientras practicaba kayak y caer al mar. Las dos ambulacias movilizadas hasta el lugar no pudieron hacer nada por salvar su vida.

La otra persona fallecida hace dos fines de semana fue una mujer de 70 años y nacionalidad portuguesa que se encontraba ingresada en el hospital de Can Misses tras sufrir una parada cardiorrespiratoria diez días antes en ese mismo punto de la isla. A pesar de que fue atendida por los socorristas y estabilizada, las lesiones sufridas resultaron ser irreversibles.