El mayoral pasa tapándose la nariz por el mal olor junto al campo.

Los propietarios de varias fincas situadas en el entorno del Parque Natural de ses Salines volvieron a ver ayer como sus cultivos quedaban empantanados con aguas fecales.

La red de tuberías que lleva las aguas residuales y pluviales a la depuradora de Sant Jordi y ses Salines pasa por en medio de esas fincas. Cada vez que llueve la red desborda y deja el campo lleno de aguas fecales y todo tipo de desperdicios que vienen de los sumideros de particulares.

El mayoral de una de ellas, Mariano Ribas, denuncia además que, desde que se instaló la red, el agua de los pozos ha pasado de ser potable a estar contaminada. La filtración de las aguas fecales ha alcanzado los acuíferos. «Hemos pasado de tener una de las mejores aguas de la isla a no poder casi ni utilizarla» se lamentaba desesperado.

Indica que se han puesto en contacto varias veces con el ayuntamiento sin recibir solución, más allá de parches que evitan que esto suceda una sola vez.

Todo aquello que tenían plantado en esto momento, como eran pimientos, coliflores o tomates se han perdido. «No puedo vender estos productos a nadie» indicaba ayer el propietario, Deo Gracia Lara. Acusa al ayuntamiento de inactividad y de pasarle la pelota a Abaqua cuando es responsabilidad del Consistorio. «Desde luego el que no es responsable aquí soy yo, que no tengo nada que ver con las aguas fecales de todos los vecinos», comentaba indignado.

Informó de que pondría la correspondiente denuncia tanto en los juzgados como en el propio ayuntamiento. Otra vez. Sin embargo el daño ya esta hecho e indica que cada vez que esto pasa recuperar la finca requiere de mucho tiempo y dinero.