El día 1 de agosto los taxistas protestaron por las calles de Vila contra las licencias VTC. Fotos: DANIEL ESPINOSA | Marcelo Sastre

El plan de autorizaciones de VTC del Consell d’Eivissa, en el año 2011, aprobó un concurso público para adjudicar 25 licencias de este tipo hasta alcanzar un total de 50 en la isla. Estas autorizaciones se concedieron a cuatro empresas y con ellas se alcanzó «el número máximo de 50 autorizaciones de la clase VTC» para la isla. «Estas licencias se concedieron en concurso público, están bien adjudicadas y por sentencia firme, por lo que no se pueden cambiar. El problema lo tenemos con las licencias que vienen de fuera de la isla», explicaron fuentes del Consell. El problema es que hay empresas que vienen de la península y que vulneran el régimen jurídico de funcionamiento de las VTC, ya que sus servicios superan el 20%, en cómputo trimestral, de los que prestan en su domicilio de residencia. Es decir, que permanecen más tiempo en la isla de lo que tienen permitido por ley (el máximo son 18 días por trimestre).

Este es el origen del conflicto por el que el sector del taxi se plantó a nivel nacional con las huelgas de esta última semana y que la Federación Insular del Taxi en Ibiza (Fitie) secundó el pasado martes. «La problemática del taxi ilegal se está derivando hacia las VTC deslocalizadas que superan el máximo de tiempo permitido por el cual pueden operar en la isla. Es una ilegalidad que estamos persiguiendo», apuntaron fuentes de la máxima institución insular.

Contra el intrusismo

La Comisión de seguimiento del Plan contra el intrusismo es el instrumento del que dispone el Consell para perseguir la actividad ilegal en el transporte, ya sea mediante taxis ‘pirata’ o licencias de VTC ilegales o deslocalizadas. Desde el Consell explicaron que, respecto al conflicto de ámbito estatal, comparten el mensaje del Gobierno central de «dotar de seguridad jurídica el sector» y que tanto los taxis como las VTC pueden operar de forma equilibrada. «Esperamos que el Gobierno de Pedro Sánchez ponga los instrumentos legales para hacerlo posible», concluyeron.

Cabe recordar que la Asociación de Asalariados de Santa Eulària criticó que la Federación balear del Taxi pidiese 700 licencias VTC, pero tras la polémica suscitada, la entidad renunció a su pretensión. En todo caso el Consell recordó que «no supone ningún problema en caso de que su ámbito de actuación sea Mallorca». En caso de que quisieran prestar sus servicios en Ibiza, la ley es la misma que para las licencias que vienen de la península.