Autobús de ALSA calcinado a finales de septiembre en Sant Jordi. | MARCELO SASTRE

El Consell d’Eivissa no tiene constancia de que ALSA, una de las empresas responsables del servicio insular de autobús, incumpla rutas previstas, como así denunció su comité de empresa el pasado fin de semana, pero tampoco tiene forma de saber si se llevan a cabo o no. «Con la nueva contrata sí que tendremos acceso a los datos del número de expediciones y cuándo se llevan a cabo pero ahora sólo tenemos las denuncias. Si los trabajadores tienen constancia de que se han retirado líneas que nosotros habíamos anunciado de que duraban más tiempo es algo que podemos reclamar a la empresa, pedirle explicaciones y si entendemos que estás incumpliendo el contrato, abrirles un expediente», apuntó ayer la consellera de Mobilitat, Pepa Marí.

La consellera socialista señaló que la semana que viene tiene previsto reunirse con el comité de empresa de ALSA para conocer de primera mano sus reclamaciones y denuncias, en las que alertó de que la flota de buses que está operando en Ibiza está «en muy mal estado».

Los trabajadores también destacaron que ALSA trae autocares de la Península «para reforzar la flota existente y son los que no quieren allí por el estado en el que se encuentran». Destacaron, además, la «cantidad de averías que surgen a diario, en plenas rutas, con los inconvenientes que estas pérdidas de tiempo le suponen a los pasajeros, que son quienes las sufren ya que implican retrasos en las líneas».

El comité de empresa aseguró que llevan «años denunciando el estado de la flota de autobuses con la respuesta por parte de la empresa que, tras la concesión, lo veremos».

Nueva concesión
La consellera Pepa Marí aseguró que en la próxima concesión «se exigirá una edad máxima a los autobuses y una renovación obligatoria cada equis años».

En cuanto a los accidentes sufridos en las últimas semanas por buses de la red insular de transporte, Marí recordó que la empresa ALSA elaborará un informe para saber los motivos por los que uno de sus vehículos se incendió hace dos semanas en Sant Jordi.

Otra de los motivos de queja de los trabajadores han sido los retrasos y problemas de organización en las rutas escolares del municipio de Sant Josep. Un asunto que Pepa Marí sufre «como madre pero que nosotros no podemos entrar ya que de ellas se ocupa la Conselleria d’Educació».