Varios de los miembros de la Asociación Iboshim de Recreación Histórica posaron orgullosos con parte del material que han ido consiguiendo a lo largo de todo este tiempo. Fotos: DANIEL ESPINOSA

Hoy viernes a las 10.30 horas comienza la quinta edición de las Jornadas de recreación histórica Insulae Antiquae que tendrán en la Necrópolis de Puig des Molins su epicentro durante todo el fin de semana. En ellas participan asociaciones de recreación histórica de contrastado prestigio como los zaragozanos Athenea Promakos, especialistas en el mundo griego y los ejércitos del período clásico tardio y el helenismo; los íberos de Ibercalafell y Antiqua Iberia; los gladiadores romanos de Gesta Gladiatoria; y Bellum Annibalicum, una asociación para la recreación de las Guerras Púnicas.

Junto a ellos, encontraremos a los ibicencos de la Asociación Iboshim de Recreación Histórica, encargados de la organización del encuentro junto al Museo Arqueológico de Ibiza y Formentera, en colaboración con el Govern balear, el Consell d’Eivissa, el Ayuntamiento de Ibiza, Baleària o la Fundación Julián Vilàs Ferrer.

Precisamente los ibicencos se afanaban ayer por la tarde en dar los últimos retoques para que todo luzca perfecto en el campamento que instalarán en la Necrópolis y que se podrá visitar durante hoy, mañana y pasado.

Según explicó ayer a Periódico de Ibiza y Formentera el tesorero de la asociación Carlos Martínez, la asociación se creó a través de dos amigos en el año 2009 «como un homenaje a la cultura fenicio púnica que hubo en Ibiza hace miles de años» y actualmente se ha convertido en un grupo totalmente consolidado con unos 15 asociados «a pesar de las dificultades que entraña el haberse centrado en esta civilización de la que no hay tantos restos ni tantos productos en el mercado».

En este sentido, Martínez aseguró que para que sus recreaciones sean lo más fiables posibles recurren a la iconografía de la Grecia clásica, a textos clásicos, sobre todo de autores romanos, y a historiadores que les ayudan. Posteriormente, el material se hace por encargo en especialistas repartidos por Europa y España a pesar de que hay escudos de la época de Alejandro Magno que se pueden emplear.

De hecho, para realizar lanzas reglamentarias han tenido que recurrir a los alumnos de Forja de l’Escola d’Arts para hacerles las puntas y a un artesano de Lyon para que les mandará su stock de cuatro regatones, las partes inferiores de las lanzas. Y para más inri, sólo llegaron tres porque uno estaba dañado. Incluso, el propio Martínez lleva esperando un año un casco muy parecido a uno que hay en el museo del Louvre de Paris que encargó al especialista José Manuel Pastor.

Otro problema con el que se encuentra la asociación es la insularidad. Carlos Martínez asegura que en los aviones no pueden viajar debido al material tan particular que trasladan y eso hace que los viajes se tengan que realizar en barco y luego en coche, algo que supone «una gran inversión de dinero y de tiempo». Afortunadamente, desde la Península se sigue contando con la Asociación Iboshim de Recreación Histórica «porque no hay ningún grupo que se haya animado a recrear el ejército púnico y la vida en la Iboshim de aquella época».

Tambien juega a su favor el gran nivel de sus recreaciones, y que pueden transformarse en romanos e íberos con relativa facilidad. «Dentro de nuestras humildes posibilidades la gente sabe que somos históricamente muy fiables y creo que hemos conseguido que se nos respete y que, incluso nos llamen, como en el invierno pasado, para convertirnos en unos legionarios de Roma que vigilaban a unos esclavos que sacaban sal de Ses Saliness», asegura Martínez.

Los interesados en participar en esta particular aventura pueden ponerse en contacto con Carlos Martínez en el 653218601 y desde allí se pueden recibir todo tipo de consejos para iniciarse.