Alumnos y alumnas de los principales colegios e institutos públicos de Santa Eulària llenaron el salón de plenos del Ayuntamiento. | DANIEL ESPINOSA

El Ayuntamiento de Santa Eulària celebró ayer por la mañana el pleno infantil y juvenil de invierno, una cita a la que acudieron alumnos de los principales colegios e institutos públicos del municipio y en la que pudieron presentar ideas y propuestas para mejorar sus centros de enseñanza y Santa Eulària en su conjunto. Durante la sesión, se puso el foco principalmente en la lucha contra las diferentes formas de violencia, especialmente, contra la violencia de género.

En el inicio de la jornada, los alumnos leyeron el Manifiesto contra la Violencia, que también condena los estereotipos de género y el acoso escolar como formas de violencia a erradicar, y que fue presentado en el VII Parlament Infantil de les Illes Balears. Bajo el título ‘Inventando la vacuna de la paz y el buen trato’, alumnos y alumnas procedieron a enumerar una serie de ingredientes y componentes que deben regir las relaciones humanas, entre ellas la comprensión, la capacidad para escuchar, los abrazos y los besos, el respeto y la tolerancia, etcétera.

En cuanto a las propuestas concretas para eliminar la violencia de la sociedad, los alumnos aportaron ideas como el intercambio de roles entre niños y niñas, más charlas sobre violencia de género, procurar que el lenguaje sea inclusivo y no sexista, proporcionar un whatsapp 24 horas alternativo al de la Policía Nacional y protocolos de detección en el ámbito sanitario, así como talleres y campañas a través del Ayuntamiento y el Punto Jove, en cuanto a medidas contra la violencia de género se refiere. También se puso sobre la mesa la necesidad de redactar un protocolo de protección para las víctimas de acoso escolar en los centros educativos, realizar charlas y campañas de concienciación sobre el peligro de jugar a videojuegos o ver películas no acordes para la edad del usuario y la creación de una Comisión de Convivencia en el Ayuntamiento que intervenga en los conflictos relacionados con la violencia entre los más pequeños.

También hubo espacio para la puesta en común de ideas encaminadas a mejorar la vida del municipio. Las demandas más importantes se centraron en mejorar el transporte público, aumentando el número de paradas en las zonas rurales y poner más frecuencias horarias para facilitar la asistencia de los alumnos a las actividades extraescolares. Se hizo hincapié en la necesidad de poner más carriles bici, la instalación de máquinas de reciclaje mediante la que los usuarios recibirían una cantidad simbólica de dinero que incentive a ello, mejorar el alumbrado, las fuentes públicas, ampliar las aceras, más parques, jardines y zonas verdes y otra estación de carga para vehículos eléctricos.