Imagen en la que se puede apreciar el alto nivel de detalle de las figuras que componen el belén. | Marcelo Sastre

Jesús González Casado nació hace 42 años en la localidad gaditana de Jerez de la Frontera. Lo hizo en el céntrico barrio de Sant Mateo, en pleno casco histórico y muy cerca de los populares barrios de Santiago y San Miguel. Allí, cuando era adolescente conoció a un señor que se dedicaba a hacer belenes y junto a sus amigos, siempre que podía, se acercaba a su casa para compartir horas con él. Poco a poco fue aprendiendo y, finalmente, el tema le enganchó tanto que actualmente, más de veinte años después, es el encargado desde 2010 de montar el belén que se puede ver todas las navidades en el Ajuntament Vell de Sant Antoni.

En Andalucía y en Jerez de la Frontera hay mucha afición por los belenes y eso, unido a los conocimientos que ha ido adquiriendo Jesús año tras año a través de cursos y vídeos de Internet, se nota en la calidad del nacimiento de Sant Antoni, lugar en el que vive desde hace 14 años. Este año ha tardado cerca de un mes en su elaboración y gracias a una idea que tuvo su hijo ha dado un paso más para seguir subiendo el nivel. Se ha decantado por recrear un paisaje nevado que parece salido de una película de Hollywood; algo que ha conseguido, según explicó el belenista a Periódico de Ibiza y Formentera, con unos polvos que encontró en una tienda de materiales de construcción de Ibiza.

El belén tiene día y noche

En este mundo nevado de unos 6 metros de ancho y 5 metros de profundidad hay un bosque, una muralla, un río helado y una decena de figuras que van pasando del día a la noche. El realismo de las figuras también es algo que llama mucho la atención a los visitantes. Según Jesús González, tienen unos 18 centímetros y son piezas únicas y numeradas elaboradas por un reconocido artista de la península utilizando la técnica ‘a palillo’, es decir, «primero modeladas en arcilla y posteriormente endurecidas al horno a más de 900 grados centígrados».

De todas ellas destacan las que forman parte del nacimiento y que Jesús ha instalado en una espectacular gruta que tiene una cascada, una escalera y distintos productos de alimentación a escala. Además, el belenista jerezano destaca los tres reyes magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, con sus respectivas monturas «por su gran nivel de realismo».