Turquía se ha convertido en el principal competidor turístico de Mallorca y resto de islas, ya que capta turismo alemán y británico.

La pasada Worl Travel Market de Londres puso sobreaviso al sector hotelero balear y español de que se entra en una nueva coyuntura turística con el «despertar» de los destinos vacacionales del Mediterráneo oriental.

Todo ha cambiado y se acabaron los desvíos de turistas por atentados terroristas que se han venido produciendo desde el año de 2013 en Turquía, Egipto y Túnez. Baleares ha sido uno de los grandes beneficiados por este motivo, pero en la actual temporada se ha podido comprobar el descenso del turismo alemán y británico y en los ratios de ocupación hotelera. Esta situación preocupa tanto a hoteleros de Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera como al resto de sectores productivos turísticos, caso del transporte discrecional por carretera, agencias de viajes y oferta complementaria.

Esta tendencia irá a más porque los grupos turísticos, entre ellos Thomas Cook, TUI, Alltours, Jet2, FTI y Der Touristik, han variado su estrategia comercial y apuestan firmemente por la comercialización de paquetes turísticos a Turquía, Egipto, Túnez y Marruecos de cara a 2019 y en años venideros. No se recatan en decirlo y para ello argumentan que Mallorca «se ha convertido en un destino caro».

A estos países hay que sumar el resurgimiento de Grecia, que en ha superado todos sus récords históricos de llegadas (ver gráfico adjunto) y dejado atrás los problemas de imagen que se derivaron por los disturbios callejeros en Atenas a causa de la crisis económica y recortes del Gobierno heleno.

Tendencias

En Londres, Hannover, Frankfurt y Colonia, sedes de los principales touroperadores, se han tomado decisiones estratégicas para los próximos años y Baleares no está entre sus prioridades. Esto es debido a la apuesta que han hecho los gobiernos turco, egipcio, tunecino y griego por dar las máximas posibilidades y opciones a los grupos turísticos europeos.

Hay mucho en juego y el «vale todo» se ha convertido en algo común, más aún cuando la estrategia de bajada de precios y ayudas estatales a los touroperadores ha dado un vuelco a la reservas a esos países.

Turquía acumula un 70 %, Egipto un 60 % y Grecia, pese a la escalada de precios, contabiliza un 20 % de incremento de ventas de paquetes turísticos para el verano 2019.

Los hoteleros de Mallorca, que son los grandes perjudicados por esta tendencia, se plantean actuar con la misma moneda, pero las elevadas inversiones realizadas para mejorar su oferta de alojamiento (más de 1.500 millones) les hace actuar con prudencia.

Esto ha provocado que muchos hoteleros estén firmando contratos en garantía para los próximos cuatro años, como así se puso de manifiesto en la pasada World Travel Market. Esto sucede con las pequeñas y medianas cadenas que no tienen el músculo comercializador de las grandes cadenas.

En Meliá, RIU, Iberostar y Barceló no se plantean entrar en esta dinámica comercial, porque prefieren tener habitaciones vacías que malvenderlas. «Con un 60 % de ocupación a los actuales precios se rentabiliza un establecimiento de cuatro y cinco estrellas. Además, captamos un tipo de clientela que antes no venía a la Isla, de ahí que el turismo de bajo precio no nos interesa», afirman fuentes de la Agrupación de Cadenas Hoteleras de Balears (ACB).

El futuro es incierto y los touroperadores vuelven a manejar el reparto de un pastel que da muchos dividendos, genera empleo y riqueza en los países receptores del turismo europeo. Se avecina una guerra comercial en toda regla, lo que afectará de lleno a los volúmenes de negocio de la empresas de las Islas.

La Federación Hotelera de Mallorca (FEHM) no puede mediatizar la política comercial de las empresas, pero sí mantener hilo directo con los responsables de las Oficinas Españolas de Turismo (OET), entre ellas Londres, Berlín, Frankfurt, París, Estocolmo, Milán, Bruselas, Dublín, Lisboa o Zurich para estar al corriente de cómo evolucionan los mercados.

Turespaña está en contacto con todas las autonomías para llevar a cabo estrategias promocionales conjuntas, para ello ha reposicionado su política de comercialización ferial y online.