Un 60% de los propietarios de los 523 edificios de los barrios de la Marina y sa Penya han presentado la evaluación.

Técnicos municipales del Ayuntamiento de Eivissa han encontrado deficiencias en 47 edificios de los barrios de la Marina y sa Penya, según el informe de evaluación de edificios para inmuebles de más de 50 años de antigüedad. En un tercio de los edificios con evaluación desfavorable se han encontrado deficiencias estructurales que pueden afectar a la seguridad.

Según explicó ayer el Ayuntamiento a través de una nota de prensa, el 60 por ciento de los propietarios de los 523 edificios de la Marina y sa Penya han cumplido el plazo para presentar el informe.

Con la mitad de expedientes informados por parte de los técnicos municipales, los propietarios de los inmuebles deberán realizar labores de reparación en 47 casos debido al mal estado de las fachadas o techos o por la presencia visible de equipos de aire acondicionado.

En 2019, según explicaron desde el Ayuntamiento, la obligación de presentar el informe de evaluación de edificios se extenderá a Dalt Vila, donde hay 277 inmuebles, y al entorno de Vara de Rey, con 56 fincas.

Los propietarios podrán acreditar el estado de conservación y nivel de eficiencia energética de los edificios hasta finales de diciembre. En caso de incumplir la obligación, habrá infracciones urbanísticas que irán aumentando progresivamente.

En caso de los informes presentados sobre La Marina y Sa Penya, se han aceptado las alegaciones de 40 propietarios que consideraron que su finca debe quedar exenta de la obligación de presentar el IEE.

Según el Consistorio, los propietarios de inmuebles donde se han detectado deficiencias dispondrán de seis meses para solicitar una licencia de obras y reparar los daños. En los casos favorables, el certificado del IEE tiene una vigencia de diez años, por lo que después deberá renovar la acreditación.