Andreu Roig, Antoni Marí y Santi Marí, ayer en el pleno de Sant Joan. | T.M.

El pleno del Ayuntamiento de Sant Joan aprobó ayer solicitar que el puesto auxiliar de la Guardia Civil instalado en el pueblo aumente de categoría y se convierta en un puesto ordinario con más efectivos y con un horario de atención más amplio que el que tiene en la actualidad.

El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí, explica que hasta 1963 su municipio contaba con dos cuarteles de la Guardia Civil, uno en Sant Joan y el otro en Sant Miquel. Entonces, tan solo se mantuvo el de Sant Joan, que a principios de la década de los 90 se redujo a puesto auxiliar. «Creo que un municipio como Sant Joan, con una dispersión poblacional muy grande, se merece más que un cabo y cuatro guardias civiles, que por otro lado hacen un trabajo extraordinario».

‘Deixalleria’
El equipo de gobierno del PP apoyó una moción presentada por el PSOE para que Sant Joan cuente con una ‘deixalleria’. Este municipio y el de la ciudad de Eivissa son los únicos de la isla que no cuentan con un punto limpio fijo en su territorio. «Me alegra que el PSOE haga esta propuesta porque cuando gobernaba Xico Tarrés en el Consell yo se lo propuse, ofrecí un terreno urbanizable detrás de Can Coroner y me dijeron que no porque no era suelo industrial. Ahora volveremos a presentar el mismo terreno, a ver qué nos dicen, porque suelo industrial nosotros no tenemos por ahora», apuntó Carraca, que recordó que él puso en marcha las deixalleries móviles cuando era conseller insular.

Por último, el pleno descartó la propuesta del podemita Gian di Terlizzi de comprar un bus eléctrico para conectar los principales núcleos urbanos del municipio con el polideportivo. «Es una buena idea pero tenemos dudas legales porque nosotros no tenemos competencia en movilidad interurbana. Se tendría que incorporar en el Plan de Movilidad del Consell», aseguró el alcalde de Sant Joan.