R.B.Z., el futbolista suizo detenido el sábado en Ibiza por la agresión a una joven que sufrió lesiones graves, abandonó ayer el Centro Penitenciario de Ibiza tras completar la cantidad de 3.000 euros que tenía impuesta como fianza para quedar en libertad. Así lo confirmaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears.

El ya exjugador del equipo suizo Étoile Carouge, podrá abandonar la isla y regresar a su país a la espera de ser citado para la celebración del juicio por los hechos ocurridos la madrugada del sábado en el Parque de la Paz.

El titular del juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza, Francisco Javier Bretones, decretó el domingo un auto de prisión provisional eludible con fianza de 3.000 euros. El juez imputa al detenido un delito de lesiones con pérdida de piezas (recogido en el artículo 150 del Código Penal). El acusado se enfrentará a penas que van de tres a seis años de prisión.