El Área de Salud se encuentra liberando del mobiliario los espacios que se reformarán.

Las obras de reforma del antiguo hospital Can Misses, ahora edificio J, han dado su pistoletazo de salida con la firma del acta de replanteo el pasado miércoles, el trámite burocrático que marca el inicio de las obras. Los sindicatos se han trasladado a la primera planta con lo que la zona donde estaban los despachos de representantes de los trabajadores en la planta baja está desalojada y se puede empezar a trabajar de manera inmediata para adecuarla como el centro de salud, una de las actuaciones previstas en la primera fase de la reforma.

A lo largo de la mañana de ayer se estuvo liberando de mobiliario en desuso, sillones y camas hospitalarias, las zonas donde empezará a trabajar la concesionaria.

Un año de trabajos
La concesionaria, encargada de la realización de las obras, prevé una duración de los trabajos de 12 meses por lo que la recepción del edificio reformado se deberá producir el 14 de febrero de 2020.

La reconversión del edificio J es una de las actuaciones sanitarias más esperadas esta legislatura y que se ha ido retrasando hasta llegar a un acuerdo con la concesionaria para poder realizarla.

La reconversión contempla la reforma de la planta baja y el sótano, donde se ubicará el nuevo centro de salud de Can Misses, la residencia para profesionales y desplazados de Formentera, un espacio destinado asociaciones, el depósito de cadáveres y la sala de autopsias. Las obras contemplan, además, actuaciones en la primera planta, la antigua área de hospitalización de cirugía, que se añadió al estudio previo original porque se ha duplicado el número de habitaciones previstas inicialmente para esta unidad, pasaron de 15 a 30 habitaciones; un aumento que responde a las necesidades surgidas a partir de la nuestra estrategia de cronicidad del Servei de Salut.

El centro de salud de Can Misses es una de las prioridades de esta obra. El ambulatorio estará ubicado en la planta baja y en la planta semisótano de las antiguas consultas externas, contará con 25 consultas.

En cuanto a la zona del mortuorio multiplicará por seis su espacio. Contará con una gran sala de autopsias y un depósito con 6 cámaras mortuorias. Las asociaciones también contarán con un amplio espacio de casi 800 metros cuadrados. El criterio de inclusión de las asociaciones aún se tiene que establecer, pero deben tener un objeto asistencial y compartido por el Servicio de Salud.

Presupuesto de 3,9 millones
La obra de esta primera fase supondrá reformar 6.000 m2 de las plantas primera, baja y semisótano que ha aumentado respecto al estudio previo con la ampliación de la Unidad Polivalente de Convalecencia. La reforma contempla un aumento de hasta doce habitaciones de la residencia para profesionales que ahora cuenta con nueve. La residencia se puso en marcha hace dos años para responder a las necesidades de alojamiento de los profesionales dadas las dificultades para encontrar una vivienda.

El importe de las obras será finalmente de 3,9 millones de euros, incluido el IVA, que supone una subida de 200.000 euros del coste inicialmente del precio. Un incremento que se debe a una adaptación a los precios del mercado.