La Policía Local de Santa Eulària detuvo el pasado domingo a un hombre al que se le impidió el acceso a un bar tres veces con intención de continuar una discusión violenta con otros clientes y personal del negocio. El hombre, acusado de una desobediencia grave a los agentes de la autoridad, insultó y amenazó a uno de los agentes en diferentes ocasiones.

A las 16:15 horas del domingo se recibió el aviso de que un cliente de un bar de la calle Sant Joan del pueblo de Santa Eulària estaba increpando a otros usuarios y al personal del establecimiento. La patrulla llegó a los pocos minutos e identificó a J. F. J., que estaba gritando y profiriendo insultos en la vía pública. Para tratar de recabar información de las partes y serenar los ánimos, los policías pidieron al cliente que se apartara de la puerta del establecimiento y les informara de lo que había sucedido, momento en que el hombre se resistió y golpeó las manos de los agentes.