El principal acusado, Steven G.Z., con mirada desafiante durante la lectura del veredicto ayer en la Audiencia. | Alejandro Sepúlveda

Veredicto: culpable de asesinato. Es la decisión del tribunal del jurado contra Steven G.Z., álias ‘El Nea’, el principal acusado por la muerte del joven ibicenco de 23 años, Santi Garrido, el día de Navidad de 2017.

El tribunal del jurado hizo público ayer por la tarde el veredicto acordado por los miembros del jurado que estaban deliberando desde las 10.00 horas, cuando el magistrado presidente les hizo entrega del objeto del veredicto.

Según informaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de las Illes Balears, el jurado dictaminó que el otro acusado «sólo es autor de un delito leve de lesiones».

El jurado también consideró probado que ambos «increparon y golpearon a la víctima y que fue Steven G.Z., quién le robó con violencia el móvil», por lo que también le imputan la autoría de un delito de robo con violencia.

Tras la lectura del veredicto, la acusación pública y la acusación particular solicitaron una pena de 24 años de cárcel para S.G.Z., y dos meses de multa con cuota diaria de 10 euros para C.G.P.H.,

El Ministerio Fiscal también solicita una indemnización de 250.000 euros para la familia de la víctima. La defensa de S.G.Z solicitó la pena mínima, según informaron las mismas fuentes.

El magistrado presidente del Tribunal del Jurado acordó la puesta en libertad de C.G.P.H.

Visto para sentencia

El juicio quedó visto para sentencia y el magistrado dictará la resolución durante los próximos días.

Los dos acusados por la muerte de Santi Garrido empezaron a ser juzgados el martes por un jurado popular en la Audiencia Provincial.

Inicialmente, el Ministerio Fiscal solicitaba una pena de 18 años de prisión para el principal encausado, 14 por un delito de homicidio con instrumento peligroso y cuatro por el de robo violencia.

Ahora, el principal acusado, el considerado lider de ‘Los Guasones’, espera sentencia.

LA NOTA

La hora de la justicia por un crimen cometido en la Navidad de 2017

El principal acusado por la muerte de Santi Garrido ya espera sentencia. El rastro del móvil robado a la víctima fue determinante para que la investigación de la Policía diera con sus autores y durante el juicio quedó reflejado como una prueba incriminatoria de peso. Las incoherencias de las declaraciones de ambos acusados sobre el día de autos y la declaración de los testigos que vieron a Steven G.Z., golpeando a Santi con una botella de ron, cerraban el círculo sobre el principal acusado, un joven que a lo largo de los tres días de juicio ha mantenido una tono desafiante con todos los presentes en la sala. Ayer escuchó el veredicto y la petición del Ministerio Fiscal que ha elevado a 24 años su pena por un delito de asesinato.