Una de las cabras matadas a tiros en la matanza de 2016.

La Asociación Animalista de Balears (Assaib) se muestra convencida de que las cabras van a salir con vida de es Vedrà. Así lo dijo ayer su delegada Andrea Manzano, quien reiteró lo que dijo hace solo unas semanas: «Lo que estamos viendo ahora es una manera muy rastrera de hacer política con las cabras. Es un juego electoral para ver quién se lleva más votos», dijo. Y no dudó en tildar la situación de «vergonzosa».

Manzano se reunió hace dos meses con Gonzalo Juan, conseller de Medi Ambient, quien le explicó que se había previsto una salida para visitar el islote con una empresa especializada en la captura de animales asilvestrados. «Pedimos que dos especialistas y, a ser posible, el abogado de Assaib fueran con ellos. Lo pedimos por escrito al Consell d’Eivissa y al Govern balear, pero ninguno de los dos nos ha contestado; ni que sí ni que no», lamentó.

Assaib propuso también, incluso por escrito, hacerse cargo de los 17 ejemplares que hay en es Vedrà ya que cuenta no solo con una, sino con dos fincas que tienen «todos los papeles en regla» para acogerlas. «Si tenemos un sitio ya, ¿por qué no lo autorizan y se dejan de politiqueo barato?», se preguntó la delegada de la Asociación. Tampoco quiso olvidar que «en ningún momento, ningún partido político ha mostrado interés en este tema y ahora, de cara a las elecciones, quieren conseguir votos».

Para la Asociación Animalista el sistema para reunir a todas las cabras y sacarlas del islote está claro y coincide con la propuesta técnica realizada por la Universidad Autónoma de Barcelona. Según el departamento de Sanidad y de Anatomía Animal de la Facultad de Veterinaria de dicha universidad. Sería tan sencillo como construir un vallado -de forma temporal- e introducir dentro comida y bebida para que las cabras entren. Habría que dejar la puerta abierta, durante al menos tres semanas, para que los ejemplares adquieran confianza y, una vez estén todos dentro, cerrar la puerta.

Una vez capturadas todas las cabras, se podría realizar un control sanitario mediante la extracción de una muestra de sangre y otras manipulaciones que las autoridades competentes consideren necesarias.

Otra de las críticas de Assaib pasa porque se catalogue de «salvajes» o «asilvestradas» a las cabras. «¿Por qué es el Govern quien tiene que dar el visto bueno? ¿Por qué dice que las cabras son salvajes?», se preguntó Manzano al tiempo que especificó que «tenemos que tener claro que el islote era un corral y las cabras domésticas».

Según insistió, «es Vedrà ha sido toda la vida un corral de cabras, por lo que hay que hablar con los términos que toca porque si no da lugar a confusiones». Según dijo, los animales son domésticos porque fueron llevados por el hombre, pero se han asilvestrado con el tiempo.

PSOE y Més per Mallorca
Manzano no quiso entrar a valorar la decisión del conseller socialista de Medi Ambient, Gonzalo Juan, de no hacer declaraciones a pesar de que su socio de gobierno, Podemos, convocara una rueda de prensa el martes para pedir la dimisión de Miquel Mir, director general de Espacios Naturales y Biodiversidad, por ningunear el trabajo de la institución insular y no aceptar las propuestas de extracción de los ejemplares que hay en es Vedrà.
«Gonzalo Juan es una persona que se va a retirar y, pienso, está esperando a que pasen las elecciones para quitarse del medio. Se sabe que él no las quiere matar porque está buscando alternativas, pero tanto el Consell como el Govern lo están haciendo muy mal porque nosotros, como parte implicada, deberíamos estar informados de lo que pasa y seguimos esperando respuesta a nuestro email», espetó.

Sin embargo, sí que cargó contra Més per Mallorca al decir que «está claro que les encanta utilizar la violencia». Aún así, no considera que estén echando para atrás las propuestas porque «no les conviene después de la repercusión que tuvo lo que hicieron en 2016», refiriéndose a la matanza a tiros de más de medio centenar de ejemplares.

Assaib, como el resto de asociaciones animalistas, solo piden que no se juegue con los animales y que se deje de hacer política con ellos. «Lo que no queremos es que Més per Mallorca interfiera en el destino de las cabras y que se decida en Ibiza, con las propuestas que hemos hecho desde Assaib», concluyó Manzano.