La procesión de la cofradía Nuestro Padre Jesús del Gran Poder salió de la iglesia del Roser y marchó durante más de tres horas hasta la Catedral de Ibiza. | MARCELO SASTRE

Cuando apenas quedan ya dos días para la celebración de la procesión del Santo Entierro, prevista para este viernes, y mientras media Ibiza está pendiente de las previsiones meteorológicas ayer fue el turno de la procesión de la cofradía Nuestro Jesús del Gran Poder, creada en 2008 al amparo de la Casa Cultural Andaluza de Ibiza.

Como suele ser habitual la imagen del santo, construida en el año 2003 por el escultor sevillano Jesús Méndez Lastrucci, salió de la iglesia del Roser y procesionó por las calles de Ibiza para emprender un largo y duro camino que le llevó además en algo más de tres horas por el barrio de la Marina, la Cuesta del Rastrillo, el Portal de Ses Taules, Dalt Vila y finalmente la Catedral, donde esperará pacientemente para salir el viernes.

Fueron más de tres horas de marcha que, incluyeron como es tradición, dos paradas obligadas, una en la iglesia de Santa Cruz, donde salió al encuentro la imagen de Nuestra Señora de la Esperanza y otra en la iglesia de Santo Domingo, en Dalt Vila, donde fue recibida por el Cristo del Cementerio.

En el recorrido participaron numerosos cofrades, incluyendo los treinta que se van turnando para llevar la imagen y el trono de unos 400 kilos sobre sus hombros, y los miembros de la banda de música Gran Poder Ibiza, que desde el año pasado está incluida dentro de la cofradía. Además, como es tradición, siguieron a la imagen numerosos fieles que ya se acumularon a la puerta del templo para verla cruzar la pequeña puerta. Un momento muy especial que requiere una gran habilidad por parte de los cofrades encargados de ello ya que la imagen, elaborada en madera de cedro real policromada pasa muy justa debido a su tamaño.