A pesar de la lluvia, los turistas que ya habían reservado sus vacaciones en Balears aprovecharon los momentos en los que no llovía e incluso bajo la lluvia para visitar la isla, comer fuera o hacer compras. | DANIEL ESPINOSA

Las patronales del sector de la restauración y del sector hotelero en Ibiza se muestran satisfechas con los resultados de esta Semana Santa. Si bien la climatología no ha acompañado, la sensación es que ha habido bastante afluencia de turistas estos días y que el inicio de la temporada ha sido bueno.

Joan Riera, presidente de Pimeef restauración, indica que los grandes afectados por las lluvias de la Semana Santa fueron aquellos que dependen de las terrazas. «A todos los que dependen de las terrazas les ha ido mal. Pero los hoteles y restaurantes de Vila han trabajado bien, a pesar del mal tiempo los datos son positivos». Si bien en la patronal no tienen datos concretos, indica que en general el sector ha visto «a mucha gente» por la isla.

En el mismo sentido se expresó la presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif), Ana Gordillo, que indica que la ocupación media en los establecimientos hoteleros que han abierto en Semana Santa fue de un 76%. «Es verdad que el tiempo no ha acompañado y podríamos estar hablando de otras cifras si hubiera hecho mejor tiempo con las reservas de última hora, pero los números que hemos tenido nos satisfacen en el sector».

Entre los comerciantes del barrio de la Marina esa afluencia de gente no ha tenido el mismo impacto. En la tienda ‘Les Candeliers’, Evelyn, una dependienta, indicaba que la bajada repentina de las temperaturas provocó una caída en las ventas con respecto al año pasado. Calculaba un descenso de beneficios de en torno al 50%.

También en Vicente Ganesha indicaban que la gente paseaba, a pesar del mal tiempo, «pero no compraba». Su dueño, Vicente Hernández, esperaba que con la llegada del buen tiempo mejoraran estos números «porque con lluvia no se puede trabajar bien».

Menos reservas británicas

La presidenta de los hoteleros indicó que se había producido un descenso del 7% de las reservas del sector británico. Si bien es un descenso significativo en el principal mercado turístico para la isla, Gordillo recordó que «las reservas de último minuto y la venta directa siempre cambian mucho el resultado final».

Además apuntó que la tendencia hasta enero del mercado británico había sido de «ralentización» de la llegada de reservas, pero a partir de enero se había notado una nueva aceleración. «Esperemos que esta mejora siga y que lleguemos a junio con unas buenas previsiones».