Fotograma del proyecto ganador del concurso de ideas para el Parador de Turismo de Ibiza.

El Consejo de Ministros ha autorizó ayer a Turespaña la contratación de las obras de rehabilitación del Castillo y Almudaina de Dalt Vila como futuro parador de turismo por un valor estimado del contrato de 21,1 millones de euros.

La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, aseguró en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que este parador es muy importante para el turismo de la zona y por ello el Gobierno ha considerado retomar las obras que llevan paralizadas ocho años.

El Gobierno confía en que el Parador de Ibiza contribuya a mejorar la rentabilidad social y económica del turismo en Baleares y a generar una actividad turística más diversificada, ya que, «gracias a los restos arqueológicos que serán preservados, se generará un nuevo modelo de turismo cultural».

Las obras del establecimiento llevan paralizadas ocho años como consecuencia, entre otros motivos, de la aparición de restos arqueológicos que hicieron necesaria la redacción de un nuevo proyecto.

Esta nueva propuesta recoge, por una parte, las actuaciones necesarias para completar las obras interrumpidas del parador, y por otra, la ejecución de un aparcamiento subterráneo y de las nuevas infraestructuras de acceso.

El Parador dispondrá de 72 habitaciones distribuidas en el conjunto de edificaciones que conforman el recinto del Castillo y la Almudaina de Ibiza. Además, integrarán el conjunto un centro de interpretación, un spa, una piscina exterior con un solárium, al menos una sala multifuncional y un aparcamiento subterráneo de 40 plazas.