El acusado fue sorprendido por agentes de la Policía Local de Sant Antoni. | Archivo

Dos años de cárcel y multa de mil euros. Es la pena impuesta ayer por la Audiencia Provincial a un hombre de nacionalidad inglesa que en el verano de 2016 se dedicaba a la venta de drogas en Sant Antoni.

El juicio se celebró ayer en la sección segunda de la Audiencia de Palma. El acusado reconoció los hechos y ratificó el acuerdo de conformidad que previamente habían alcanzado su defensa y el Ministerio Fiscal. La defensa ha solicitado la suspensión de la pena de prisión por un periodo de cinco años.

Según el relato de los hechos probados, el condenado, John G.S., fue sorprendido la noche del 5 de agosto de 2016 teniendo en su poder un total de 31 comprimidos de MDMA, cinco bolsitas con seis gramos de cocaína y otras tres con 2,3 gramos de ketamina. El valor de las sustancias intervenidas rondaría los 1.200 euros.

Además, el acusado también tenía 1.897 euros repartidos en 58 billetes de 20 euros; 50 billetes de 10 euros; 23 billetes 10 euros y un billete de cinco.

Los hechos son constitutivos de un delito contra la salud pública y el Ministerio Fiscal solicitaba inicialmente una pena de tres años y medio de prisión y multa de 3.500 euros.