Los populares criticaron la «dejadez» del equipo de gobierno y destacaron que, entre otros detalles, no recibieron a los trabajadores de la contrata de limpieza en su última protesta para exigir mejores salarios.

El PP de Sant Antoni criticó ayer que el equipo de gobierno sea «incapaz» de mantener el pueblo limpio a pesar de contar con una nueva contrata de limpieza desde hace más de un año, por la cual el Ayuntamiento paga 4,5 millones de euros anuales, lo que son casi un millón de euros más de lo que se pagaba anteriormente, según recordaron los populares. «Ha pasado más de un año desde que entró en funcionamiento la nueva contrata y no se ha notado ninguna mejoría, lo que demuestra que son incapaces de gestionar un servicio que dijeron que sería una prioridad», explicaron los populares, que remarcaron que es «evidente que el supuesto aumento de frecuencia de recogida de basura y de limpieza viaria no se está cumpliendo o no está dando los resultados esperados», destacaron en una nota de prensa.

El PP recordó que el concejal de Medi Ambient, Pablo Valdés, achaca siempre los problemas de limpieza al incivismo, pero antes de entrar en política hacía responsable de esta situación al Ayuntamiento, lo que demuestra su «doble vara de medir». «Después de cuatro años al frente del departamento la excusa del incivismo se le está agotando», afirmaron desde las filas populares e invitaron a Valdés «a trabajar y controlar el servicio para que funcione correctamente». En este sentido, apuntaron que a pesar de estar pagando 60.000 euros a una empresa para que controle a la adjudicataria de limpieza, el servicio sigue sin funcionar. «PSOE y Reinicia no están actuando y se han olvidado de que son ellos los máximos responsables. En vez de echar las culpas a los demás deberían hacer autocrítica y empezar a gestionar correctamente». Los populares afirmaron que la «dejadez» del equipo de gobierno provoca que el extrarradio esté siempre lleno de basura y las calles y las aceras de Sant Antoni estén sucias ofreciendo una imagen «deplorable» a los primeros turistas de la temporada.