«Nos pagaron los meses de noviembre y diciembre, pero ya volvemos a llevar unos meses sin cobrar y lo más grave es que ahora, a las demoras de Justicia, se suma la suspensión de actuaciones y plazos decretada a raíz del incendio en los juzgados de Isidor Macabich». Este es el panorama denunciado ayer por varios letrados del turno de oficio que subrayan que ellos también se están viendo «muy damnificados por la caótica situación que sufre la Justicia pitiusa desde el pasado 21 de enero, día en el que un incendio dejó fuera de servicio los Juzgados.
Estos abogados advierten que no pueden liquidar sus trabajos ya que la mayoría de procedimientos están suspendidos y las causas penales son mínimas, ya que solo se celebran vistas con preso, causas urgentes y de violencia de género.
Asimismo, apuntan a una situación de «cierto desamparo ya que no tienen información sobre el panorama y los plazos reales para la normalización de la situación».
Los letrados consultados también critican la falta de respuesta desde Madrid y las deficiencias que siguen habiendo más de tres meses después del incendio. «Es cierto que se van dando pasos, pero hay cosas que no son de recibo». En este sentido, tanto abogados como el sindicato CSIF denuncian la falta de espacio y las condiciones del juzgado de Instrucción de guardia que permanecerá en la sala habilitada en la torre 1 del Cetis.
Durante la jornada de ayer se concluyó el traslado del personal de los juzgados de Instrucción a la torre 6 del Cetis y la previsión es que a partir del lunes empiecen a operar en el nuevo emplazamiento. No obstante, el juzgado de guardia continuará en la torre 1, donde también permanece el juzgado de Violencia sobre la Mujer, el Instituto de Medicina Legal y Forense, y otros servicios.
Según fuentes judiciales consultadas por este medio, el juzgado de guardia permanece en la torre 1 del Cetis debido a los problemas que se derivarían del traslado de detenidos, así como por la ausencia de sala de vistas en la torre 6.
En el camino de la normalidad
El delegado de Salud Laboral del CSIF, Sabino Aramburu, apuntó que «ha costado, pero la administración ya empieza a verbalizar que las condiciones no son óptimas. Es cierto que con el traslado a la torre 6 se mejora la situación, pero es que veníamos de una situación insostenible e impropia», argumentó.
La secretaria coordinadora provincial del TSJIB, Josefa Juan, destacó que con la entrada en funcionamiento de estos nuevos espacios «avanzamos mucho respecto a la situación anterior» y es un paso importante para «comenzar a trabajar con un poco más de normalidad, pero no podemos alcanzar el cien por cien de operatividad». La recuperación del pulso total no será posible hasta la entrada en funcionamiento de la nueve sede judicial de sa Graduada.
De momento, nadie pone fecha al traslado, pero todo apunta a que no será posible antes del verano.
EL APUNTE
Torre 1: salas sin ventilación y Forensía sin espacio para la camilla
El traslado de los cuatro juzgados de Instrucción al espacio alquilado en la torre 6 del Cetis supone «un avance interesante, pero insuficiente para alcanzar la normalidad».
Las carencias se reflejan en las estrecheces que sufren en la Forensía. La estancia es tan pequeña que la instalación de una nevera para guardar las muestras conlleva que la camilla para los reconocimientos tenga que estar recogida y apoyada sobre la pared. Por otra parte, el CSIF ha reiterado su solicitud de una serie de pingüinos de aire acondicionado ya que, según apuntó Sabino Aramburu, las salas no están acondicionadas.
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