Los bomberos se desplazaron a la vivienda para refrescar la zona quemada.

La actuación del conductor de un camión cisterna evitó ayer que el incendio que se había declarado en el almacén de una vivienda unifamiliar del entorno rural de Sant Agustí no terminara en un suceso desastroso.

Al parecer los propietarios de la vivienda, situada en la carretera de Sant Agustí junto al restaurante Sa Soca, llamaron la atención de la persona que conducía un camión cisterna de Forn Nou que pasaba por la zona. El camionero ya se estaba dirigiendo hacia la vivienda al haber visto el humo mientras hacía su ruta. Al llegar descargó la cisterna de agua que transportaba y apagó el fuego por inundación.

Al lugar de los hechos se desplazaron sobre las 18:15 horas siete efectivos del cuerpo de Bomberos en un camión bomba y un camión cisterna, miembros de la Policía Local de Sant Josep, Guardia Civil y una ambulancia.

Al llegar a la vivienda los bomberos sencillamente tuvieron que refrescar la zona, dado que en el garaje había varios palmos de agua y el fuego estaba extinguido.

El fuego podría haberlo iniciado un cortocircuito en la lavadora o la secadora que había en el garaje, que es donde los bomberos identificaron el foco del incendio.