Los niños que participan en estos talleres aprenden historia de una forma divertida y práctica y se convierten en arqueólogos por unos días. | DANIEL ESPINOSA

La arqueología y el estudio de la historia de los primeros pobladores de Ibiza está en muy buenas manos y tiene un gran futuro por delante si nos atenemos a lo que se puede ver durante esta semana en la Casa Pagesa d’es Porxet, en plena Necrópolis púnica de Puig des Molins. Allí se están desarrollando un año más con un gran éxito los Talleres de arqueología que organiza el Museu Monogràfic de Puig des Molins y que coordina la arqueóloga Carmen Mesquida.

En este caso, hasta el viernes los protagonistas son 24 niños de entre 5 y 7 años, quienes volverán a repetir del 12 al 16 de agosto. Antes, durante la última semana de junio fue el turno para los que tienen entre 8 y 12 años, quienes tendrán más posibilidades durante todo este mes, buena parte de agosto y la primera semana de septiembre. También hay opción para que disfruten de la actividad los adolescentes de entre 13 y 18 años las semanas del 29 de julio al 2 de agosto y la del 5 al 9 de este mismo mes.

Este año Carmen Mesquida vuelven a aprovechar todas las posibilidades que ofrece esta casa pagesa, con un yacimiento casi real, y además ha dado una vuelta a los talleres y una de las principales novedades es que al final de cada día ella les cuenta un mito griego. En ellos se habla de personajes como Medusa, Eco o Aracne y al día siguiente los participantes elaboran un pequeño muñeco marioneta que se pueden llevar a casa como recuerdo o usarlos como protagonistas en la gran obra de marionetas del último día.

Además, durante la semana se hace un repaso de las distintas culturas que han habitado Ibiza a lo largo de los siglos. El lunes tocaron los fenicios y además de excavar con sus herramientas las tumbas, los jóvenes arqueólogos elaboraron una figurita del dios Bes. Ayer martes fue el turno de los púnicos, también hubo excavaciones y construyeron una máscara de la diosa Tanit así como amuletos fenicio-púnicos. Hoy viajarán hasta Roma y entre otras cosas traerán una fotografía suya para ir colgando la vestimenta y el material que se empleaba en aquella época; el jueves volverán a la época islámica, elaborando figuritas de pasta de sal para que comprendan la importancia de las salineras en la cultura y la historia de la isla y construirá una Jamsa en la que podrán colocar incienso, y finalmente el viernes harán repaso de lo aprendido y disfrutado. «No hay ningún niño en los más de quince años que llevamos haciendo el taller que se haya ido diciendo que no le ha gustado lo que ha hecho y eso es una gran satisfacción para mi y para todo el equipo porque se demuestra que aprender historia también puede ser algo divertido y al alcance de todas las edades», confirmó Carmen Mesquida ayer a Periódico de Ibiza y Formentera.