Javier Marí y Emliano Beltrán en el paseo de ses Figueretes. | Arguiñe Escandón

Los vecinos con discapacidad del barrio de ses Figueretes denuncian que tras terminar las obras que el Ayuntamiento lleva meses haciendo en el paseo, los puntos de acceso para las personas con movilidad reducida, tanto al paseo como a la playa, son deficientes.
Su principal queja es sobre la rampa que han reformado en la plaza Julià Verdera, que ahora tiene más pendiente que la que había antes de comenzar la reforma del paseo.
Javier Marí Guasch y Emiliano Beltrán, dos vecinos de la zona con movilidad reducida manifiestan que «el Ayuntamiento de Eivissa ha cambiado las dos rampas que había a ambos lados de la plaza, por una escalera y una rampa más corta y más inclinada, que resulta peligrosa e inaccesible para muchos usuarios».

Estas rampas eran importantes para ellos porque les permitían poder acceder desde la calle País valència, calle principal del barrio, al paseo. Ahora debido a la inclinación de la nueva rampa solo pueden acceder a través de ella las sillas eléctricas. «Para las sillas manuales, personas con andador o carritos de bebés, es imposible el acceso», indican.
Según detalla Emiliano Beltrán: «se me levantan las ruedas delanteras si intento subirla y me voy para atrás, bajar también es peligroso por la gran inclinación».
La siguiente rampa más cercana con buen acceso al paseo de ses Figueretes está a unos 200 metros en la calle Tarragona. Rampa que el Ayuntamiento ha ampliado pero los vecinos explican que no acceden a ella desde la calle principal y «tienen que dar más vuelta que antes para bajar al paseo».
Mencionan que algunas rampas las han sustituido por escaleras aunque también han hecho algunas nuevas pero «con bastante distancia entre sí».
Beltrán comenta que «para acceder a la arena está más o menos similar a como estaba pero con mucha distancia desde un punto de acceso a otro también y las rampas que finalmente nos introducen en la arena, lo hacen de forma brusca. Sólo con alargarlas un poquito se podría hacer la entrada más suave porque el problema es que son demasiado cortas».

Marí comenta que hay más detalles que supone dificultades para las personas con discapacidad como que «el carril para los invidentes está pegado al carril bici. Esto es algo peligroso. También faltan barandillas para las personas que necesitan agarrarse para bajar o subir por las rampas».
El Ayuntamiento alega que «la rampa de la plaza Julià Verdera no es para personas con movilidad reducida y la anterior no era accesible tampoco y no llegaba a la playa. Es una rampa de carga y descarga. El acceso al paseo para personas con movilidad reducida está en la calle Tarragona, justo al lado de la plaza». Subrayan que «desde allí, se accede al paseo que es totalmente accesible y no tiene barreras arquitectónicas, cumpliendo con toda la normativa vigente». Explican que «falta todavía la señalización y algunas partes que afectan a la movilidad. El punto accesible al aseo y a la playa se señalizará para que no haya dudas.».

Un usuario habitual de la playa de ses Figueretes, Alfredo Estébanez de 62 años, manifiesta que aunque él no tiene ninguna discapacidad, observa que hay puntos de accesos pero «muy distantes entre sí. Hay algunos tramos que tienen que andar muchos metros para conseguir bajar a la playa». Detalla que padece del corazón y «sé lo dificultoso que es a veces subir unas escaleras o tener que andar más de lo necesario para llegar a un lugar». Tacha de «vergonzosa esta situación» y añade que «algunas rampas que han hecho de madera del paseo a la playa no las veo duraderas», considera que «sería más estable haberlas hecho de hormigón y más cuando las acaban de hacer nuevas».

Javier Marí apunta que en general «durante los tres años que voy en silla de ruedas, Ibiza me parece una ciudad cómoda para moverse pero denuncio esto ahora porque ya que aún están terminando las obras, si se arregla ahora todos estos detalles, mejor».
Cabe recordar, que antes de iniciar las obras el alcalde de Vila Rafa Ruiz aseguraba que «la idea es hacer una ordenación que permita que la gente pueda pasear bien sin obstáculos. También se eliminarán barreras arquitectónicas».