La huelga de las ‘Kellys’ tiene por objetivo lograr regular la carga de trabajo. | Toni Planells

Hoy y mañana las ‘Kellys’ de Ibiza van a la huelga y las repercusiones de esta medida inédita en Balears no han pasado desapercibidas.

Tanto es así que ayer por la mañana el presidente del Consell d’Eivissa, Vicent Marí, se pronunció sobre el conflicto en declaraciones recogidas por Europa Press. «La huelga convocada no deja de ser una mala noticia para Ibiza», sentenció Marí. Aunque reconoció que «sabemos que es un derecho constitucional, que se debe respetar, y los trabajadores en este caso intentan mejorar sus condiciones laborales». Sin embargo, lamentó que «somos un destino turístico y, en estas fechas, causará un impacto negativo en el turismo». Por esto, realizó un llamado de conciencia: «lo que queremos es que haya diálogo entre los sindicatos y la patronal y que se pueda encontrar una solución pactada que es lo mejor para todas las partes. Por ello apelamos al diálogo».

Reclamo
Por otra parte, desde CGT Ibiza y Formentera denunciaron ayer en un comunicado a «los hoteles de Ibiza y Formentera que se llenan los bolsillos a costa de la salud de las Kellys». Según señala su informe, tras realizar diferentes búsquedas de reservas en webs de hoteles implicados en el conflicto, con entrada el día 23 de agosto (entrada) y el día 26 de agosto (salida), es decir, los días previo y posterior a la huelga convocada, encontraron que «nos parecen estratosféricos los precios de los establecimientos que son la ‘vanguardia’ hotelera en el mundo y que además son premiados o se acaban de abrir». «A título de ejemplo los 2 establecimientos con el alojamiento más caro son: Hard Rock Ibiza, y su habitación ‘Gran Suite Mirador isla blanca’, con un precio de 6.800 € la noche, es decir, que para las noches que hemos buscado reserva se pagaría 20.400 €», puntualizaron. Ante esto, denuncian la carga excesiva de las trabajadoras bajo la justificación de la competitividad y reclaman un mejor reparto de la riqueza en el sector para poder hacer frente a la dificultad del acceso a la vivienda, la temporalidad y el caro nivel de vida de Ibiza y Formentera.