En Can Misses ha habido una pequeña gotera en radiología y en Es Viver ha entrado agua por el vestíbulo principal | ARCHIVO

La gota fría causó grandes estragos en la ciudad de Ibiza.
Poco después de las nueve de la mañana empezó la gran tromba de agua que inundó la isla, afectando tanto a carreteras y calles como a algunos edificios, que han sufrido grandes goteras , retrasando el desarrollo normal de la actividad que se realiza dentro de ellos.
En el caso del Hospital Can Misses se ha registrado una gotera en el servicio de radiología que, afortunadamente, «no ha afectado a la labor asistencial», según fuentes del propio Hospital.

Por otra parte, el temporal en las Pitiusas también ha afectado al Centro de Salud de Es Viver, concretamente a las instalaciones de la Unidad de Salud Mental, donde tres despachos se han visto inundados con hasta dos dedos de agua y ha retrasado la atención de consultas mientras los servicios de limpieza, que se reforzaron durante el día para agilizar el proceso, se hacían cargo.
También el agua ha alcanzado la entrada al vestíbulo principal por las arquetas exteriores, por lo que se han destapado las arquetas para la libre circulación del agua como solución.

Quejas generales
A pesar de que los problemas fueron solucionados rápidamente y que apenas afectaron a los usuarios, los ciudadanos manifestaron su descontento en redes sociales.
Las quejas han ido dirigidas, principalmente, a la gravedad que suponen estas incidencias dada la «poca antigüedad» del las nuevas instalaciones del Hospital Can Misses.
Por ejemplo, un ciudadano manifestó que «todas las nuevas construcciones en Ibiza son iguales, muy bonitas pero muy mal construidas» haciendo referencia también a que los nuevos juzgados, que en principio, iban a entregarse en un par de meses, también han sufrido inundaciones y goteras.
Por su parte, otra usuaria del Centro de Salud de Es Viver subrayó que «lo de este centro tampoco es algo nuevo. Siempre ocurre».
En este sentido, desde el Ib Salut afirmaron que habían tomado medidas para solventar los problemas con la máxima rapidez posible y que no ha causado inconvenientes que se puedan calificar como «reseñables».