Agentes de la Guardia Civil durante un control en Santa Gertrudis. | Paco S. Pérez

«En zonas como Santa Gertrudis la situación vuelve a ser bastante preocupante porque todas las semanas hay robos y además hemos visto como algunos delincuentes han actuado con armas de fuego y entrando en casas con sus moradores dentro». Son palabras de Toni Serra, uno de los vecinos que han sufrido más de un robo en los últimos años, en su caso hasta tres asaltos.

La última vez que los delincuentes forzaron su vivienda, Toni y su mujer dormían en la casa. «A nosotros no nos pasó nada más allá de los objetos sustraídos y los daños causados en la propiedad, pero recientemente hemos visto cómo los delincuentes entraron a plena luz de día y armados con pistola en una casa con sus dueños dentro. Esas situaciones dan mucho miedo y entendemos que este grado de violencia ya es muy preocupante», advierten varios vecinos desde la plataforma de víctimas de robos en casas de campo de la Isla.

Los temores a un repunte de los robos y de la violencia por parte de los delincuentes es compartida por buena parte de los vecinos que se conectan a través de la plataforma de víctimas de robos en casas de campo. Entienden que la situación no es tan crítica como la sufrida en 2017, pero advierten que el final de la temporada ha traído más robos en viviendas.

Robos con armas
La semana pasada se registraban varios robos con fuerza. Por un lado, en una vivienda localizada en el entorno de la estación de la ITV. Los ladrones reventaron la puerta y pusieron «la casa patas arriba buscando objetos de valor», señalaron. Paralelamente, en Sant Josep, los delincuentes asaltaban la villa del futbolista Marco Borriello. Tal y como informó este medio en su edición del lunes, los ladrones esgrimieron armas cortas y abandonaron la propiedad llevándose un botín de unos 15.000 euros y joyas como dos relojes de alta gama de la firma Rolex.

Anteriormente, el 14 de septiembre, tres individuos armados con al menos una pistola asaltaron una vivienda de Santa Getrudis localizada en la carretera de Sant Mateu. Ocurrió a mediodía y con sus dueños dentro. Los ladrones se llevaron dinero, una escopeta de caza y un vehículo.

Días después una casa de Sant Miquel era reventada por tres individuos que, poco después, fueron detenidos por la Guardia Civil. El juez los envió a prisión.

Desde la plataforma vecinal destacan la labor de la Guardia Civil, pero advierten que «seguimos teniendo el mismo problema de siempre: hay pocos agentes y medios para combatir a tanto delincuente», lamentan.