Jesús de la Villa Polo, catedrático de Filología Griega y presidente de la SEEC.

Esta tarde a las 19.00 horas en Can Ventosa, Ibiza, tres de las personas que más saben sobre latín, griego y cultura clásica en España participarán en la mesa redonda ¿Tiene sentido la enseñanza del latín y el griego en nuestra época? Incluida dentro de una nueva edición del Curs de Pensament i Cultura Clàssica: Escoltar, aprendre i dialogar amb els clàssics. Son Antonio Alvar Ezquerra, catedrático de Filología Latina de la Universidad de Alcalá y expresidente de la Sociedad Española de Estudios Clásicos (SEEC), Jaime Siles Ruiz, catedrático de Filología Latina de la Universitat de València y también expresidente de la SEEC y Jesús de la Villa Polo, catedrático de Filología Griega de la Universidad Autónoma de Madrid, actual presidente de la Sociedad y protagonista de esta entrevista.

—El título de la mesa redonda es muy atractivo. ¿Qué pretenden con ella?
—Es cierto. Incluso provocativo. Somos tres personas que llevan muchos años dedicando nuestra labor profesional a la defensa del latín y el griego en el ámbito educativo y a su presencia en la sociedad. Y si me pregunta si tiene sentido su enseñanza en nuestros días le diré rotundamente que sí.

—¿Por qué?
—Porque es básica para entender nuestro día a día. De hecho, el mundo clásico está muy presente en todos los ámbitos de nuestra sociedad y ha quedado demostrado que sigue siendo muy atractivo para una gran cantidad de público. Sólo hay que ver el éxito que tienen las películas o series de televisión sobre Alejandro Magno, Troya o Roma.

—¿Por qué dice que Roma o la Grecia clásica están muy presentes en nuestra sociedad si desaparecieron hace tantos siglos?
—Porque solo hay que echar un vistazo a nuestro alrededor. El teatro, el arte, la literatura y por supuesto la democracia se entienden mucho mejor si sabemos de donde provienen. Se puede vivir perfectamente sin saber que la democracia nació en la antigua Atenas pero, sinceramente, creo que tener conocimientos del mundo clásico ayuda a comprender mejor las cosas. Y eso pasa por poner a disposición de los estudiantes de Bachillerato todas las herramientas para ello.

—Yo tuve la suerte de estudiar latín y griego en el colegio. ¿Ahora como está el tema?
—Hoy todo pasa porque las autoridades sigan siendo conscientes de que los estudiantes deben seguir teniendo contacto con la cultura clásica. Hasta ahora hay una asignatura optativa que se imparte en la ESO pero creo que debería ser obligatoria para que entiendan mejor su día a día. Por ejemplo, en la Comunidad Valenciana hay una asignatura en Bachillerato que es de lenguaje científico. La idea es muy interesante y está teniendo mucho éxito porque los jóvenes se dan cuenta de que si quieren estudiar medicina, biología, botánica u otras carreras de este tipo tienen mucho ganado si saben de donde provienen la mayoría de los términos.

—Hablando de idiomas. ¿Somos lo que somos gracias al latín o al griego?
—Sin duda. Tenemos que ser conscientes de que el ochenta por ciento de las lenguas romances provienen del latín. Es decir, que los españoles, los italianos, los franceses o los catalanes hablamos latín aunque una amplísima mayoría no lo sepan o no le den importancia. Y con el griego más de lo mismo. El 99 por ciento del vocabulario científico y muchos de los nombres de los profesionales de la medicina que se usan en nuestros días proviene de aquellos tiempos.

—Desgraciadamente parece que no se es consciente de todo ello...
—Sí. Se puede vivir siendo igual de feliz sin saberlo pero creo que entenderíamos mucho mejor todo lo que nos rodea si conocemos de donde viene el nombre de odontólogo o que terapia viene del término del griego antiguo que se usaba para decir cuidados o curación. Si somos conscientes de ello, sabremos de donde vienen términos cono terapia de grupo o talasoterapia, un método curativo de algunas enfermedades que se fundamenta en el clima y los baños marinos.

—¿Y entre los adolescentes hay interés por la cultura clásica?
—Ellos ponen interés en todo lo que se les venda y explique bien. Si el contenido es atractivo y los profesores son buenos se quedarán enganchados porque la materia prima ya de por si es muy interesante.

—Desgraciadamente hay una corriente en nuestra sociedad actual que piensa que todo lo que tiene que ver con la Grecia clásica o Roma es una antigualla...
—Y es una pena. Hay quien cree que estudiar historia o literatura que no sea la actual no tiene sentido porque hay que vivir en nuestro presente. Lo veo un error muy grave porque no somos nada sin nuestro pasado.