Los comerciantes llevan años pidiendo mejoras para el barrio. | MARCELO SASTRE

Los comerciantes del barrio de la Marina y del puerto de Ibiza se reunieron ayer para hacer balance y afirmaron que el Ayuntamiento de Eivissa debe mejorar la accesibilidad y señalización a esta zona de la ciudad. Una zona que, según recordaron, pertenece al «casco histórico» de Ibiza.

Quejas
«La principal queja que tenemos es que se debe mejorar la accesibilidad y señalización. Desde que se cambió el sentido a las calles y se restringió el acceso hay mucha confusión», explicó ayer Elisa Roselló, presidenta de la Asociación de Comerciantes de la Marina, quien destacó que en el acceso al puerto hay una señal de restricción al tráfico, pero también se indica que sólo se puede pasar 20 minutos y, si se entra sin darse cuenta, existe la posibilidad de pagar tres horas de parquin y recibir, semanas después, la multa por haber entrado sin ser vecino.

«En el barrio y en el puerto vivimos mucha gente; no es un polígono industrial alejado de la población. Tenemos un problema muy gordo; estamos al final de Vara de Rey y, cuando llegas allí y no sabes por dónde seguir, te das la vuelta y te vas, la gente no llega ni a entrar», recordó Roselló, quien señaló que el acceso al puerto debería estar abierto. También piden a Vila una parada de taxis en la plaza de Sant Elm.

«Las peticiones que hacemos las reiteramos desde principios de la legislatura pasada, de ahí viene nuestro hartazgo y el cansancio. No nos escuchan». Roselló recordó que las ventas cayeron el año pasado entre un 30% y un 40% que no se han recuperado desde entonces. En cuanto a la presente temporada de invierno, la presidenta de los comerciantes de la Marina y secretaria de la Federación de Comerciantes La Marina-Puerto de Ibiza afirmó que «hay mucha gente que ha intentado abrir, pero no se puede. Pensamos que no hay suficiente plan de choque para que esta zona se ponga en valor; es el casco histórico de Ibiza, cualquier ciudad cuida su centro histórico», concluyó.