La inauguración de la exposición en el C19 de Ibiza se celebró este martes. | MARCELO SASTRE

Este martes se inauguró una exposición de obras de los alumnos de la Escuela de Arte de Nadia Banegas, Es Traç, en el Centro de creación joven C 19 de Vila.

Hasta el sábado podemos encontrar obras de alumnos de todas las edades, a partir de seis años, con varias técnicas y multitud de temáticas. Los más pequeños son más figurativos y los adultos, más abstractas. Uno de los alumnos de menos edad es Ariadna Roselló de 6 años. Ha creado dos cuadros, «hechos con témperas, uno de un manzano en donde se ven las manzanas que se están cayendo porque están en otoño y otro de una tarta de cumpleaños». Otra participante es Marta Noguera, que representa «unos expresivos osos hechos con ceras».

También hay otros niños que pintan con óleo al agua como Andrea Palacios, que ya lleva tres años en la escuela de Nadia Banegas. Por su parte, Ángel Ricarte, de 12 años y con cuatro en la academia, ha realizado un autorretrato muy original «con cartón, rotulador y acrílico». Finalmente, Sara Lago se ha decantado por dos cuadros, uno con un tucán de gran colorido y elaborados «con rotuladores acuarelables».

16 años de su escuela
Banegas estudió Bellas Artes en Barcelona para dedicarse a la enseñanza. Trabajó como profesora en escuelas municipales de Ibiza y hace 16 años abrió su academia, Es Traç. En ella también imparte clases de teatro, «porque paralelamente a su formación artística se ha formado en este ámbito», y, desde hace poco, una clase del arte japonés Ikebana, impartida por una profesora de ese país.

Las clases son reducidas y la enseñanza es personalizada, siguiendo el aprendizaje y evolución de cada alumno. Además, Banegas aseguró a Periódico de Ibiza y Formentera que, en sus clases, «los niños tocan todos los materiales porque así se aburren menos». Siempre empiezan copiando un dibujo «porque el hecho de copiar ya forma parte del proceso de aprender a dibujar, que es la parte más dura», y luego se aplica el color, con diferentes técnicas. Los niños más pequeñitos empiezan con témperas «porque así a prenden a usar el pincel, limpiarlo o mezclar los colores». Después, pasan al acrílico y al óleo al agua. Para los mayores, el proceso es diferente ya que si alguien prefiere dibujar algo más figurativo elige el óleo o algo más expresivo.

En este sentido, la artista aseguró que, «a pesar de que los niños de hoy en día quieren obtener los resultados de forma inmediata», con ella «un dibujo puede durar un mes, sin que exista la satisfacción inmediata y sin que algunos niños lo aguanten». Por eso, asegura que también «aprenden disciplina con unas normas que hay que cumplir».

A la escuela acuden niños desde 5 años hasta edades adultas. Algunos asisten de forma continua desde hace varios años, otros lo dejan y luego vuelven e, incluso, hay quien viene para estudiar Moda o Teatro. Para la artista y profesora, «la creatividad es algo innato en todos los niños» y cree que en las escuelas «no hay suficientes profesores especializados que se hayan formado específicamente para impartir una asignatura artística».