Zona en la que se encuentra el tanque de tormentas para lograr que no se produzcan vertidos de aguas fecales al mar. | Toni Planells

Los comerciantes de la zona del puerto y la Marina de Eivissa se muestran contrariados y escépticos ante el nuevo retraso de la entrega de las obras para renovar el sistema de saneamiento de Vila y la efectividad del tanque de tormentas, situado frente al embarcadero que cubre el trayecto entre Ibiza y Formentera.

Un día después de que fuentes que trabajan en la obra confirmaran a este medio la demora hasta finales de enero del funcionamiento definitivo del sistema de tanques de tormentas y estaciones de bombeo, que debería de solucionar los problemas de vertidos, los comerciantes mostraron su resignación ante el nuevo retraso de las actuaciones.

«Ya no nos sorprende porque esto va para largo y es de risa», comentó el presidente de la asociación Comerciantes del Puerto, Joaquín Manuel Senén. En su opinión, a la Autoritat Portuària de Balears, Consell d’Eivissa y Ayuntamiento les «ha faltado contundencia, ir juntos y apretar las tuercas para que esto no vuelva a pasar y se solucione lo más rápido posible».

Se dan largas

«El plus ha sido que se haga un tanque de tormentas y que no esté la conexión eléctrica o que se vayan dando largas. Los comerciantes de la primera línea de mar de la calle Lluís Tur i Palau y Andenes son lo más perjudicados porque, cuando sale toda la suciedad, se ven desde preservativos hasta heces, y es una vergüenza porque parece la cloaca del municipio», apuntó el representante de los comerciantes.

Senén señaló, uno de los problemas de los que adolece el sistema de saneamiento ibicenco es que en Vila «no están separadas al 100 % las aguas pluviales de las fecales» y aunque le consta que en la Marina se está dividiendo, hay calles en las que no. «Si no se hace en todas las calles, no se arregla nada porque, quieras o no, en algún punto de la red va a ir todo mezclado y lo principal es que, cuando venga al tanque, esté separada la pluvial y la fecal de todo el municipio. Esta es la clave», remarcó.

«Las obras han ido muy lentas y, además, todavía no se ha puesto en marcha el tanque de tormentas, así que no le vemos el resultado», señaló Jaume, que trabaja en una ferretería próxima a la zona donde se producen los vertidos.

Preguntado por si cree que el tanque de tormentas solucionará el problema de los vertidos, Jaume explicó que «no tenía ninguna ilusión porque todo lo que hacen nunca funciona». «¿Cuántos años hace que cambiaron el alcantarillado y sigue igual? Yo no he visto ninguna mejora, por lo que desconfiamos totalmente», agregó.

Otro de los comerciantes de la zona es Francisco Costa. Con sorna, critica que «llevan tanto tiempo de obras que hemos perdido la noción del tiempo que están ahí». «Yo creo que la zona se seguirá inundando porque las alcantarillas no tienen capacidad para recoger todo lo que llega y rebosa la porquería. No creo que el tanque solucione absolutamente nada», argumentó.

Por su parte, la concejala de Urbanismo de Vila, Elena López, interrogada por este nuevo retraso, incidió en que desde el Consistorio están «muy encima» de las dos administraciones responsables de la obra, Abaqua del Govern y el Ministerio para la Transición Ecológica, para que se ponga en marcha «lo antes posible».

«Es una infraestructura muy importante para la ciudad, dado que es una zona inundable y es necesaria para la recogida de aguas pluviales, por eso se ha colaborado con el resto de administraciones para ser lo más ágiles posibles», concretó López.

En cuanto a la posibilidad de llevar a cabo actuaciones para separar definitivamente las aguas fecales de las pluviales, López aseguró que desde el equipo de gobierno municipal trabajan «desde la pasada legislatura en la separación de fecales y pluviales, como cuando se hizo la peatonalización de Vara de Rey y Plaza del Parque, o la obra del año pasado en ses Figueretes. Ahí ya se hizo la acometida de la separación además de en algunas calles de la zona más antigua de la Marina», apuntó.