Imagen del edificio en el que se encuentran las plantas de Medicina Interna del hospital Can Misses de Ibiza.

La epidemia de la gripe está empezando a coger fuerza y sus efectos ya se notan en los centros sanitarios. Ayer a las ocho de la mañana, había ocho personas pendientes de ingreso en el hospital Can Misses. A lo largo de la jornada matinal, la situación se fue normalizando. El pasado 2 de diciembre se activó el plan de contingencia.

En el caso del hospital Can Misses se han reforzado con siete camas más para ampliar la unidad de hospitalización de Medicina Interna, contratando a 14 profesionales y ayudando con más personal la Unidad de Hospitalización a Domicilio, de forma que con este refuerzo se ampliaría la capacidad de 22 a 33 pacientes.

La gripe genera complicaciones en personas con enfermedades crónicas, sobre todo aquellas que tienen problemas de insuficiencia respiratoria y edad avanzada. Por este motivo, se hace especial hincapié en las campañas de vacunación.

De hecho, la promoción de esta temporada se ha prolongado hasta hoy. Inicialmente estaba prevista hasta el 19 de diciembre, pero se decidió prolongar la vacunación para que llegara al mayor número de población.

El otoño ha tenido unas temperaturas suaves y no ha sido hasta estas fechas cuando el termómetro ha empezado a bajar. El Área de Salud dispuso inicialmente de 15.180 vacunas, de las que 14.580 dosis se distribuyen en Ibiza y el resto, 600, fueron a Formentera.

La Conselleria de Salut ha adquirido tres tipos de vacunas distintas en función de la edad y alergias. Una para menores de 65 años (vaxigrip tetra), otra específica para mayores de 65 años (Chiromas), además de una tercera para alérgicos al huevo.