Una de las trabajadoras, Itziar Irigoyen, aseguró ayer a Periódico de Ibiza y Formentera «que están siendo unos días muy extraños» porque están acostumbradas a trabajar atendiendo cara a cara y ahora lo hacen todo a puerta cerrada. A pesar de ello, sus horarios siguen siendo los mismos, desde las 08.00 a las 15.00 horas, turnándose los días que pasan en la biblioteca municipal de Ibiza, en Can Ventosa, con los que acuden al archivo, en el edificio institucional de Can Botino, en Dalt Vila.
Su volumen de trabajo no ha disminuido sino que ha aumentado. Algo que se debe, según Fanny Tur, al interés de muchos residentes de todas partes de la isla en hacerse socios de la biblioteca municipal de forma telemática para tener acceso a los fondos bibliográficos del Ministerio de Cultura y del Consell d’Eivissa.
Además, en el caso de la biblioteca el trabajo aumenta debido a campañas que han puesto en marcha para animar a los ibicencos. Dos de las que más aceptación están teniendo son la difusión de poemas escritos o recitados de autores cuyo fondo está en la biblioteca, y los cuentacuentos que han grabado artistas de la isla y que se emiten a través de Youtube.
Esta es una tarea de la que se encarga Pilar Ibáñez con la ayuda de Fanny Tur. «A lo mejor a mucha gente no le parece gran cosa, pero es nuestra humilde contribución para que estos malos momentos se pasen lo mejor posible», explicó a este periódico la propia Pilar.
El Arxiu, a pleno rendimiento
El Arxiu Històric d’Eivissa i Formentera (AHEF) sigue también funcionando a pleno rendimiento.
En este caso Pilar Sánchez se está encargando estos días de atender las demandas de investigadores o personas de todo el país interesados en acceder a documentos que aún no están catalogados y accesibles en el apartado electrónico que tiene el Arxiu en la página web del Ayuntamiento de Ibiza (www.eivissa.es).
Otra de las tareas estos días de Pilar es escanear documentos antiguos, siempre con mucho cuidado debido a su alta importancia histórica. «Es un trabajo difícil porque tenemos que poner mucho esmero para no cometer ningún error que dañe la conservación, pero también es un trabajo precioso porque no todos los días se tiene el lujo de trabajar con documentos tan importantes para la historia de Ibiza y de España».
Por útimo, Pilar Ibáñez está sacando tiempo para catalogar la gran cantidad de donaciones y compras que ha llevado a cabo el Arxiu Històric d’Eivissa i Formentera (AHEF) durante estos años. «Si la gente se piensa que por estar cerrados hemos bajado el ritmo, está muy equivocada porque ahora tampoco paramos ni un solo minuto», concluyó Fanny Tur.
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