Varios colegiales, al salir de su centro educativo.

La Asociación de Centros Infantiles de Ibiza quiere manifestar su “máxima preocupación por las medidas que debe adoptar el sector para ofrecer la mayor seguridad a los niños, a las familias y a los trabajadores”. “La Asociación entiende la necesidad social de que se reinicien nuestros servicios para que las familias puedan conciliar la vida laboral y familiar y, por ello, estamos trabajando para poder empezar la actividad lo antes posible. No obstante esto, existe una preocupación aún mayor, como es que las medidas aplicadas son totalmente insostenibles para las empresas del sector, que se encuentran frente a una grave situación económica y social desde el cierre de los centros y que se verá agravada ante sus hipotéticas reaperturas”, explica en una nota.

“Poniendo sobre la mesa la situación actual de los centros infantiles en la isla, todos los centros afrontan una gran inseguridad después de la decisión por parte del Govern balear de no abrir los centros de los cuáles son titulares y, sin embargo, dejar a nuestro criterio la posibilidad de abrir con las restricciones que nos imponen por su parte, tanto en número de niños que podrán acoger los centros, como las medidas higiénicas y sanitarias que tendrá que tomar cada centro. Pensando en la salud y el bienestar de los más pequeños y también en la necesidad de los padres de la conciliación familiar que necesitan y aún más en estos momentos, creemos que la forma en la que se da opción al sector de volver a abrir las puertas es totalmente desacertada, dejándonos el Govern balear la responsabilidad a los centros que no son de su titularidad, llevándonos a una situación totalmente insostenible y que, si no cambia, derivará en el cierre definitivo de muchos centros”, continúa el escrito.

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“Lamentándolo profundamente, ningún centro privado de la isla va a abrir sus puertas, incluso alguno las ha cerrado definitivamente. Es más, observamos con angustia cómo se puede agravar una crisis social debido a que ningún centro homologado ni no homologado abra puertas. Esto llevaría a un incremento exponencial de la economía sumergida en el sector, exponiendo a los niños a riesgos al dejarlos en viviendas particulares no acondicionadas y sin ningún control sanitario, que sin embargo se nos exige a nosotros”, prosigue el comunicado.

“El sector ya ha hecho llegar al Govern balear las medidas que son más difíciles de adoptar y que motivarían que los centros fueran incapaces de abrir sus puertas, sin recibir ninguna respuesta, más allá de las declaraciones realizadas en el día de ayer, pero aún así no tiramos la toalla y seguimos trabajando y valorando junto al resto de entidades soluciones para poder reabrir sus puertas en las mejores condiciones de higiene y seguridad pero también con una fórmula que haga a los negocios económicamente sostenibles”, sentencia la Asociación de Centros Infantiles de Ibiza.