Terraza de un hotel de Formentera, ayer, cerrada.

La Cámara de Comercio de Ibiza y Formentera cargó de manera impasible contra el Gobierno central y el Govern. La corporación fue contundente a través de un extenso texto firmado por el Comité Ejecutivo en el que arreció contra la situación actual. Cabe recordar que este comité está encabezado por su presidente Carlos Marí Mayans y lo forman otros siete empresarios: Juan Manuel Costa (vicepresidente primero); Juan Guasch (vicepresidente segundo); Lorenzo Córdoba (tesorero); y los vocales Vicente Torres, Daniel González, José María Ramón y José Luis Benítez.

El texto, según explicaron desde la propia Cámara de Comercio, recoge las inquietudes que les han trasladado los empresarios pitiusos. Además, desde la Cámara se aseguró que no son opiniones personales, sino un compendio de quejas y alabanzas a la gestión nacional, autonómica y local.

Incertidumbre

La principal premisa del texto está en la necesidad de encontrar «el equilibrio entre la salud y la recuperación». En su duro ataque, la corporación muestra su preocupación por la derogación de la reforma laboral y habla de un «gobierno de medidas improvisadas». No dejan de recordar las muchas idas y venidas que han tenido algunas de las normas que se han aprobado durante estos días del estado de alarma. Leyes que se han tenido que actualizar en esta situación tan cambiante y desconocida. También hacen mención a los ERTEs que muchos aún no han podido cobrar.

Noticias relacionadas

Recuperar competencias

Para la Cámara de Comercio, así se recoge en el texto, es completamente imprescindible que las comunidades autónomas «retomen su papel». Consideran «imprescindible» que tengan «esa capacidad que le da inmediatez y la cercanía con las empresas y ciudadanos para poder tomar decisiones con conocimiento de causa».

Así pues, consideran «más necesaria que nunca» la gestión local. Por ello también critican al Govern por pedir más autonomía, pero no respetar de igual modo las decisiones de los Consells insulares. Dentro de esto mismo, aseguran que el Govern «trunca la voluntad del pueblo de Ibiza» al no aceptar el documento de 45 medidas enviado por el Consell d’Eivissa para el plan de reactivación económica.

Por último, apoyan al gobierno ibicenco y destacan el buen hacer de la comunidad en el aspecto sanitario. Además, reclaman que se hagan controles en puertos y aeropuertos y lamentan la falta de «unas directrices claras y precisas» para estas fases de desescalada, señalando que se ha transmitido a la ciudadanía un «optimismo que nos puede costar caro».