La Junta Local de Seguridad de Ibiza celebrada en Can Botino. | MARCELO SASTRE

Una docena de viviendas de la UA-27, la manzana desalojada en sa Penya, podría convertirse en la solución habitacional para agentes del Cuerpo Nacional de Policía destinados en Ibiza. Así lo ha anunciado este viernes el alcalde de Ibiza, Rafa Ruiz, y la delegada del Gobierno, Aina Calvo, tras la celebración de la Junta Local de Seguridad de Ibiza celebrada en Can Botino.

«Tenemos la intención de ceder 12 viviendas a un convenio con la Policía Nacional y con ello hacemos frente a dos cuestiones conflictivas: por un lado arreglamos un problema vecinal y por otro ayudamos a facilitar una vivienda a los agentes que prestan servicio en nuetra ciudad y que se encuentran con un grave problema a la hora de hacer frente a los alquileres», relató el alcalde de Vila, quien apuntó que las obras que se llevan a cabo en las viviendas localizadas en las calles Dalt y Retir podrían estar acabadas a finales de año o principios de 2021. En ese momento, Vila y la Delegación del Gobierno abordarán el convenio que pretende dar solución a un problema habitacional que se viene arrastrando desde hace años.

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Ruiz destacó el esfuerzo realizado para «recuperar un barrio privilegiado de Vila», un proyecto al que se han destinado 2,5 millones de euros y que está a un paso de su conclusión. El alcalde de Vila hizo hincapié en que en su día se desalojó a unos grupos de «gente conflictiva» y Vila seguirá dando pasos para recuperar un barrio que es todo el municipio.

El horizonte que se plantea en sa Penya fue uno de los puntos destacados sobre la mesa en la Junta de Seguridad Local presidida por Aina Calvo y Rafa Ruiz, reunión que contó con la participación del director insular de la Administración General del Estado, Enrique Sánchez, el jefe superior de la Policía Nacional, Manuel Hernández, el comandante en jefe de la Compañía de la Guardia Civil de Ibiza y Formentera, Enrique Gómez, y el jefe de la Policía Local de Ibiza, Fermín Cárcel.