Josep Marí Ribas ‘Agustinet’, alcalde de Sant Josep.

El PP de Sant Josep desveló ayer que el Consistorio josepí «quiere externalizar el personal de limpieza del Ayuntamiento para liberalizar los puestos de trabajo y reconvertirlos a su conveniencia», explicó Javier Marí, portavoz del grupo popular municipal, quien detalló que «el alcalde quiere echar de la Administración a 25 empleadas públicas para aprovechar esas plazas como considere» y tildó este movimiento como «maniobra política vergonzante que pone en riesgo a muchas familias en un momento especialmente delicado por las consecuencias derivadas de la crisis sanitaria».

En este sentido, recordó que estas empleadas no sólo limpian las dependencias municipales y el Consistorio sino también los colegios del municipios y «en estos momentos no se pueden poner en riesgo la limpieza y desinfección de estos centros, que necesitan que las medidas sanitarias se cumplan con la máxima diligencia».

El PP quiso precisar que no cuestiona la externalización de servicios nuevos o que hayan de ser reforzados «sino que condenamos el hecho de expulsar del Ayuntamiento a 25 personas que son trabajadoras públicas y que, en algunos casos, están cerca de la jubilación. Para el funcionamiento del Consistorio, son igual de esenciales estas trabajadoras que cualquier otra categoría». El PP criticó, además, la «hipocresía» del alcalde de Sant Josep, que «en 2017 acudió al aeropuerto a hacerse la foto con el personal de limpieza por la huelga indefinida y ahora actúa de manera totalmente opuesta».
La respuesta

Desde el Consistorio explicaron ayer que han planteado a los trabajadores y sus representantes sindicales tres propuestas y ninguna de ella es cerrada ni definitiva, al tiempo que destacaron que es «un proceso dialogado, donde se está contando con los sindicatos, como no puede ser de otra manera». Una de estas tres maneras es la «gestión indirecta de una parte del personal de limpieza, no toda la plantilla sino únicamente aquel contratado de carácter no fijo».

En este sentido, destacaron que «desde hace años ya se hace con la contratación de una empresa que proporciona este servicio en diferentes empresas del municipio. No estamos ante una situación nueva» y destacaron que, de salir adelante esta propuesta, «en ningún caso sería sin garantizar el derecho de los trabajadores afectados en el proceso de subrogación. Queremos dejar claro que ésta es sólo una más de las alternativas que se barajan con total transparencia hacia los trabajadores, en un proceso todavía abierto». Las otras dos opciones son la reordenación de plazas y «la contratación eventual de aquellas personas que se consideren necesarias para atender los requerimientos del Ayuntamiento».

Necesidades

En el caso de que la propuesta de externalización saliera adelante, las plazas amortizadas se asignarían «a las necesidades establecidas en la relación de puestos de trabajo (RPT) en un proceso concertado con los sindicatos de los trabajadores municipales donde, nuevamente, habrá toda la participación y transparencia que debe regir en estos procedimientos», explicó un portavoz del Consistorio josepí. En el caso del personal de limpieza, «se debe revisar por diversas razones».

La primera de ellas es «ajustarse a la necesidad de incrementar el servicio, forzadas las exigencias por la pandemia. Hace falta más personal para cubrir este incremento, pero la administración local tiene las manos atadas a la hora de hacer nuevas contrataciones».

En este sentido, desde Sant Josep recalcaron que hay «diferentes áreas» donde se debe reforzar la plantilla y que la «gestión indirecta» permitiría «liberar unas pocas plazas, que es vital poder cubrir con urgencia a otras áreas». Sant Josep dejó claro que cualquier decisión que tomen se acordará en «el marco de la concertación social».