Una de las artesanas explicando a los visitantes su producto y el proceso a seguir para hacerlo. | Arguiñe Escandón

Festes de la Terra se ha celebrado un año más, pero esta vez, de una manera más singular. Vara de Rey recibió ayer, de 19 a 22 horas aproximadamente, a una cincuentena de artesanos y oficios locales de Ibiza.

El recorrido a seguir entre los diversos puestos artesanales estaba marcado con una sola entrada, en la que los visitantes debían lavarse las manos con gel hidroalcohólico, y otro punto distinto de salida.

Hubo control tanto de la Policía Local como de Protección Civil para asegurarse de que se cumplían las medidas de seguridad.

Artesanos
«Teníamos muchas ganas de hacerlo, porque no pudimos estar en el Medieval y es la primera fiesta que podemos celebrar. Nos ha hecho mucha ilusión el volver a vivir esto», declaró Margarita Riera, una artesana orgullosa y emocionada con su trabajo.

Paquita y Antonia, la presidenta y vicepresidenta de Eines i Feines, respectivamente, indicaron que «ha habido mucha gente que no ha venido por miedo. Aunque han venido representaciones de todos los artesanos, menos las hilanderas».

La Colla de sa Bodega contaba con cuatro puestos, con dos artesanas en cada uno, ya que era el máximo permitido. En ellos venden alpargatas, mantones, sombreros, trajes, delantales, muñecos... También tienen cursos de artesanía para hacerlos, pero se les paró por la pandemia. Catalina Prats, la presidenta de la asociación, explicó que muchos niños están impacientes por volver a bailar y estrenar sus trajes tradicionales nuevos.

Catalina Ribes es una jubilada que hace, con gusto, alpargatas, sombreros y miniaturas para enseñar la cultura y ayudar «pero no por negocio».

La concejala de Participación Ciudadana, Fiestas, Transparencia y Bienestar Animal, Montserrat García, también asistió a este evento. «El trabajo, este año, ha sido diferente porque debíamos tener mucho cuidado con la seguridad y hemos estado hasta el último momento que no sabíamos si se podría hacer», indicó.

García también dijo que «los artesanos están contentos porque nadie ha hecho nada este año y a ellos les gusta salir y que la gente vea su trabajo, son cosas que si no las continuas haciendo, se perderían».

«Queremos empezar a normalizar un poco el hacer cosas en la calle, siempre sin perder de vista la seguridad. De momento no tenemos pensado hacer más», concluyó la concejala.
Al final, apareció más gente curiosa e interesada de lo que algunos se pensaban. Fue una velada acogedora llena de artesanos orgullosos de seguir con las tradiciones y la cultura de la isla, aunque fuera en estas circunstancias y bajo el característico calor de un mes de agosto.

Festes de la Terra empezaron el pasado viernes 31 de julio y durarán hasta el próximo sábado 8 de agosto, serán unas fiestas solidarias para dar apoyo al sector cultural de Ibiza, para disfrutar de ellos y de su calidad.