Gente en la playa durante el día de ayer. | DANIEL ESPINOSA

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) registró ayer jueves un intenso calor en Baleares, donde se los termómetros llegaron a subir hasta los 34 grados en las Pitiusas, una situación que cambiará de forma «radical» el sábado, cuando se espera una bajada de temperaturas y tormentas.

La humedad hace que el calor sea todavía más sofocante. Ayer se registró una sensación térmica máxima de 37 grados y la humedad superó el 70%. Foto: D. ESPINOSA

Esto motivó a la Aemet a activar, desde el pasado miércoles, la alerta amarilla por calor, que afecta al interior de Mallorca y a las Pitiusas, especialmente a las localidades ibicencas de Sant Antoni y Sant Joan y a toda la isla de Formentera.

La Aemet cree que este cambio de tiempo «seguramente supondrá un punto de inflexión en el verano».