Equipo de cardiólogos de la policlínica Nuestra Señora del Rosario.

El servicio de hemodinámica cardiaca de la Policlínica Nuestra Señora del Rosario cumple 20 años y solo en lo relativo a infartos agudos de miocardio y pacientes de ingreso urgente esta sala de especialistas ha conseguido salvar la vida a más de 40 personas cada año en Ibiza, reduciendo así casi un 20% de las muertes por este motivo, según el doctor Antoni Serra, responsable de Cardología Intervencionista de la clínica.

La importancia de esta sala para pacientes con cardiopatías es tal que su renovación tecnológica es constante. De hecho, la primera sala que se creó en la Policlínica (y la única que existe en Ibiza) en el año 2000 ya fue renovada en 2012, incorporando las inovaciones informáticas, y ahora se modernizará el servicio con con nuevos equipos que mejoran la calidad de la imagen y reducen notablemente la radiación. Según el doctor Serra, «ya tenemos en marcha la implementación de esta sala de última generación, y esto es muy importante para los pacientes y los médicos».

A raíz de un acuerdo con el Ib-Salut en el año 2005 muchos ibicencos dejaron de verse obligados a trasladarse a Palma para ser tratados en Ibiza en menos de 48 horas. En 2017, se consolidó el servicio e inició el código infarto. En la actualidad, tiene un nivel de ocupación de la mitad de lo que podría asumir: «Podríamos doblar lo que estamos haciendo y llegar a los 1.000 procedimientos al año», explica Antoni Serra, que destaca que cada año se realizan 400 cateterismos diagnósticos y cerca de 200 angioplastias coronarias, de las cuales unas 60 corresponden a pacientes que han sido trasladados por los servicios públicos de urgencias con un infarto agudo de miocardio.

El balance de estos 20 años es muy positivo para el responsable de Cardiología Intervencionista de la policlínica, que subraya que «estos pacientes llegan a veces en una situación muy complicada, como un fallo cardiaco, un shock cardiogénico o una parada respiratoria, de manera que hemos debido contar con una sala mejor preparada que la que teníamos antes». Antoni Serra subraya que, desde hace unos cuatro años, «hemos dotado a la sala de los últimos avances en tecnología, ya que la sala actual no tiene nada que envidiar a ninguna de cualquier gran hospital pñúblico de España».