La presidenta del Govern, Francina Armengol, ayer en el Consell. | DANIEL ESPINOSA

La presidenta del Govern, Francina Armengol, aseguró ayer que la isla de Ibiza tiene aún «datos preocupantes» en la evolución de la pandemia sanitaria pese a las medidas anticovid decretadas por Salud.

En rueda de prensa, junto al presidente del Consell insular, Vicent Marí, Armengol advirtió que la incidencia acumulada a 14 días ha subido en Ibiza de 248,79 casos por cada 100.000 habitantes, registrados el 27 de octubre, hasta los 336,1 del día de ayer.

Las cifras de Ibiza son superiores al resto de las islas, con 240 casos en Mallorca, 115,64 en Menorca y 57,8 en Formentera, y también al conjunto de Baleares, que tiene una incidencia de 253,51 casos, menos de la mitad que el resto del territorio español. Armengol hizo esta valoración tras mantener una reunión con el presidente Vicent Marí y los alcaldes de la isla, para la firma del convenio de reactivación económica en materia de sostenibilidad y eficiencia urbana, que supondrá inversiones por 6,7 millones de euros en la isla.

A pesar del incremento de la incidencia acumulada, la presidenta señaló que la tasa de positividad «da una visión un poco más esperanzadora» para la isla, ya que el 27 de octubre era «muy alta» de 13,13 y a día de ayer es de 10,29. «Esta tasa epidemiológica va un poco mejor», explicó, aunque precisó que en el resto de Baleares la tasa es de 6,46, «mucho más baja que la que tiene en este momento Ibiza».

La presidenta del Govern ratificó que las medidas adoptadas para la isla «son adecuadas», pero necesitan «su tiempo de aplicación para dar mejores resultados».

En esta línea, señaló que la próxima semana, según la evolución, se valorarán «las decisiones que se deben tomar en Ibiza».

Por su parte, el presidente de la entidad insular, Vicent Marí, mostró su deseo de que las medidas sean suficientes para «tumbar la curva de contagios en la isla de Ibiza, que es la que en estos momentos tiene la incidencia más alta de Balears».

El día 9 de noviembre, este próximo lunes, será cuando se revisen las medidas, momento en el que se apreciará si la situación ha mejorado o si es necesario tomar medidas más contundentes. En este sentido, Marí advirtió que «no habrá recuperación económica mientras no se consiga vencer al virus. Es necesaria la máxima implicación y la responsabilidad individual de cada uno».

No habrá confinamiento
Por otra parte, la presidenta del Govern informó de que no pedirá ante el Consejo Interterritorial de Salud el confinamiento domiciliario, como sí han planteado otras comunidades autónomas.

Armengol argumentó que las islas «están en una situación mucho mejor que el resto del Estado», con una incidencia acumulada en 14 días de 253,51 casos, que son «menos de la mitad de las medias de otros territorios españoles». «No creemos que sea justificable restringir tantos derechos a la ciudadanía de las islas en este momento», añadió la presidenta de Baleares.

Por el contrario, Armengol aseguró que las islas seguirán apostando por «aprender a convivir con esta enfermedad», protegiéndose «al máximo» mediante el uso de la mascarilla, la distancia social, el lavado de manos y la ventilación en los espacios cerrados, que «es fundamental a la hora de prevenir el virus».

La presidenta balear añadió que mientras se pueda «compatibilizar la situación sanitaria con garantías y derechos de la ciudadanía» su gobierno seguirá trabajando en esta línea, aunque matizó que se adoptarán medidas «más restrictivas en otro momento» si la situación empeora.

Primero puertos y aeropuertos
En la misma línea se manifestó el portavoz del Comité Autonómico de Enfermedades Infecciosas, el doctor Javier Arranz, quien señaló que el cierre de los puertos y aeropuertos debe contemplarse antes que otras medidas más severas como el confinamiento domiciliario que se plantean otras regiones.

Arranz aseguró que en el archipiélago no se evalúa actualmente la posibilidad de volver a confinar a la población como se hizo en la primera ola de la pandemia de coronavirus, pero sí se considera la opción de restringir la libre comunicación por aire y mar con la Península si la situación se agrava en el resto de España.

Indicó que el cierre perimetral de comunidades con mayor incidencia de la covid podría hacer innecesario el cierre de los aeropuertos y puertos de las islas, aunque se quejó de que no hay suficiente control de esas restricciones de salida, como demuestra el hecho de que el último puente se registraron en Baleares casos positivos de personas procedentes de Madrid. Si bien es cierto que puntualizó que esto está siendo una constante desde que se decretó el inicio de la pandemia.

«La situación de la Península nos afecta a Baleares. Tendremos que ver cuál es la evolución tanto en el Estado como aquí», afirmó en referencia a los próximos puentes y a las vacaciones navideñas.